LUANDA, 12 nov (NNN-PRENSA LATINA) — Más de medio centenar de torres de alta tensión fueron vandalizadas entre enero y noviembre de este año, hechos bajo investigación el domingo en Angola y considerados como actos de terrorismo.
El más reciente de estos incidentes ocurrió en el kilómetro 36 de la línea que transporta electricidad desde la subestación Cambambe, en la provincia de Kwanza Norte, hasta Viana, en Luanda; donde una torre de alta tensión de 400 kilovoltios se derrumbó debido al robo de elementos de su estructura.
Al respecto, el ministro de Estado y jefe de la Casa Militar del Presidente de la República, Francisco Furtado, consideró el sábado que se trata de acciones de sabotaje selectivo que deben ser categorizadas como terrorismo.
Aseguró que las Fuerzas de Seguridad y Defensa Nacional “van a luchar fuertemente para neutralizar a los grupos que están creando situaciones de inestabilidad, para hacer inviable el desarrollo del país”, y agregó que actualmente monitorean indicios que serán presentados a su debido tiempo.
El titular de Energía y Agua, João Baptista Borges, en declaraciones a la Televisión Pública de Angola sobre el tema, manifestó que la situación es preocupante por la frecuencia además con que ocurren estos daños a la red de transmisión de electricidad desde las presas hasta los centros de distribución.
“Hemos comenzado a correr serios riesgos de tener ciudades a oscuras. Es una situación preocupante y ya está alcanzando el nivel de extrema gravedad”, remarcó, y opinó que se trata de una acción intencionada por individuos que saben desmontar las torres por la base.
Valoró que no se trata de simples robos y exhortó a la población para que colabore en la denuncia de los actos y de los autores.
Significó que la red nacional de trasmisión de electricidad tiene más de cinco mil 500 kilómetros de líneas en todo el país y no hay capacidad para garantizar la vigilancia de todas las torres, además porque los hechos no se limitan a la provincia de Luanda, sino que sucedieron también en Benguela, Huambo y Zaire.
Estos robos suponen una erogación de millones de dólares extra para la reposición de los postes, pero sobre todo se corre el riesgo de dejar a las ciudades a oscuras, además de afectar a numerosas entidades económicas.
— NNN-PRENSA LATINA