BANDAR SERI BEGAWAN, 5 de abril (NNN-TELESUR) — El jefe de Estado y primer ministro de Brunéi, Hassanal Bolkiah, instituyó el miércoles de manera oficial el código penal que contempla la lapidación para los actos homosexuales y de adulterio, entre otros delitos. Este país ubicado al sureste del continente asiático se convierte en la primera nación que aplica la sharia o ley islámica.
El recurso legal sometido a una reforma en 2013 por instrucciones de Bolkiah, contó la aplicación de una primera fase en 2014, en la que se contempló las penas de prisión y multas para castigar ciertos delitos.
Ahora con la puesta en marcha de la sharia en Brunéi, se ha producido en el mundo un gran rechazo contra estos castigos, donde está aprobado el linchamiento contra las personas homosexuales y adúlteras, así como también la mutilación de manos o pies por actos de robo.
De igual manera se estableció la pena capital por blasfemia, difamación en nombre de Mahoma y la apostasía, donde el abortó tiene el castigo de la flagelación.
Bolkiah indicó que “la sharía, además de criminalizar y disuadir actos que van contra las enseñanzas del islam, busca educar, respetar y proteger los derechos legítimos de todas las personas, sociedades y nacionalidades de toda fe y raza”.
Entretanto, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, solicitó al sultanato suspender estas aplicaciones ya que “supondrían un duro varapalo para la protección de los derechos humanos” de Brunéi.
La nueva ley se prevé aplicar en las personas que profesen la fe musulmuna, eso representa el 70 por ciento de la población de Brunéi, y la misma podría emplearse en algunos casos, tales como extranjeros o fieles de otras creencias.
— NNN-TELESUR