PARÍS, 24 sep (NNN-TELESUR) — Miles de franceses volvieron el sábado a las calles de varias ciudades para rechazar la “violencia policial” y el “racismo sistemático” en el país galo.
Los indignados portaron pancartas que decían “Alto a la violencia de Estado”, “No perdonéis ni olvidéis” o “La ley mata”, para expresar su rechazo a la violencia policial y el racismo institucional, según recoge la agencia local France 24.
Según las autoridades, al menos 31 000 personas salieron a las calles de diversas ciudades de Francia, mientras que los organizadores elevan esta cifra hasta en más de 80 000 participantes.
Debido a la presencia del papa Francisco en la ciudad portuaria de Marsella, la manifestación se celebró bajo estrictas medidas de seguridad. El viernes, el ministro francés de Interior, Gérald Darmanin, en una carta a gobernadores locales, les pidió que “ejerzan una especial vigilancia respecto de estas concentraciones” y, en caso necesario, prohibirlas.
Los indignados en la capital, París, corearon lemas como “Policía en todas partes, justicia en ninguna parte”, “Sin justicia no hay paz”, y “Justicia para Nahel”. Entretanto, el Gobierno galo denunció una “violencia inaceptable”, después de que agentes policiales quedaran atrapados en su vehículo policial tras ser atacado con una barra de hierro por cientos de personas encapuchadas y vestidas de negro.
De acuerdo con la policía, tres personas han sido arrestadas por el incidente, que causó heridas a tres agentes.
Hace unos tres meses antes, Francia fue epicentro de protestas para denunciar el asesinato de Nahel Merzouk, un joven de 17 años que murió baleado por un agente de policía en una parada de tráfico el 27 de junio.
Las imágenes del racismo policial contra Nahel, grabadas por testigos, desataron una fuerte indignación en el país, lo que degeneró en un levantamiento popular, sobre todo en los barrios importantes de las grandes ciudades y en el cinturón metropolitano de París.
— NNN-TELESUR