PARÍS, 30 jun (NNN-CUBADEBATE) — En Francia, el Gobierno informó que desplegará decenas de miles de efectivos más y tomará medidas enérgicas ante la violencia y los disturbios desencadenados por la muerte el martes de un adolescente a manos de un policía.
La gobernadora de la región de París dijo que el jueves cerrarán a las 9 p.m. los servicios de autobuses y tranvías, para proteger a empleados y pasajeros.
Los ministros pidieron calma y advirtieron que no se permitirá que continúe la violencia que ha dejado decenas de policías heridos y dañado cerca de 100 edificios públicos.
Luego de una reunión matutina, el ministro del Interior, Gerald Darmanin, dijo que la presencia de la policía aumentará de 9 000 agentes a 40 000. En la región de París, el número de policías desplegados se incrementará a 5 000.
“Los alborotadores profesionales deben irse a casa”, afirmó Darmanin.
Aunque todavía no es necesario declarar el estado de emergencia, el ministro del Interior añadió que “la respuesta del Estado será extremadamente firme”.
Darmanin informó que 170 agentes fueron heridos, pero ninguno de gravedad. Al menos 90 edificios públicos sufrieron daños.
Las cifras de civiles heridos no se han divulgado hasta el momento.
Asimismo, Clamart, un suburbio parisino de 54 000 habitantes, anunció un toque de queda de 9 p.m. a 6 a.m., desde el jueves hasta el lunes.
Pese a que las fuerzas del orden estaban reforzadas en la noche del miércoles, la violencia urbana se reanudó luego del anochecer, cuando manifestantes dispararon fuegos artificiales y arrojaron piedras a policías en Nanterre, que lanzaron gas lacrimógeno.
Escuelas, delegaciones de policía, el ayuntamiento y otros edificios públicos sufrieron daños desde Tolosa en el sur hasta Lille en el norte.
La mayor parte de los daños fueron reportados en los suburbios parisinos, según un portavoz de la policía nacional.
Las llamas dañaron el ayuntamiento en el suburbio parisino de L’Ile-Saint-Denis, no lejos del estadio nacional y la sede de las Olimpiadas.
— NNN-CUBADEBATE