NUEVA YORK, 6 abr (NNN-ANGOP) — La ONU ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para recaudar 877 millones de dólares (801 millones de euros) para hacer frente a la grave crisis humanitaria de Burkina Faso en 2023, donde una de cada cinco personas necesita ayuda.
“La situación humanitaria en Burkina Faso en 2023 es más preocupante que nunca. Este plan se caracteriza por una priorización muy estricta, dirigida a 3,1 millones de mujeres, hombres y niños con necesidades agudas y urgentes”, dijo Abdouraouf Gnon-Kondé, coordinador humanitario interino de la ONU en el país, en un comunicado el martes.
Al igual que otros países de la región del Sahel, Burkina Faso se enfrenta a las consecuencias de la crisis climática en forma de sequías, inundaciones y otros fenómenos meteorológicos extremos, situación agravada por el aumento de los precios de los alimentos y otros productos básicos debido a la guerra en Ucrania y a la crisis de la COVID-19.
De hecho, como advirtió Save the Children a finales de enero, se espera que más de 7,5 millones de personas se enfrenten a un “hambre severa” en los próximos seis meses en la región del Sahel Central (Níger, Malí y Burkina Faso).
A la crisis se suma la inseguridad provocada por el terrorismo, fuente de violencia y atentados en Burkina Faso desde abril de 2015, a manos de grupos vinculados a Al-Qaeda y al Estado Islámico, que ha provocado el desplazamiento forzado de más de 1, 9 millones de personas.
“La crisis de seguridad favorece una reducción continua del acceso humanitario”, advirtió la ONU.
“Los enfrentamientos entre las fuerzas de defensa y seguridad y los grupos armados, las incursiones de personas armadas y el establecimiento de puntos críticos militares tienen un impacto considerable en el acceso humanitario a la población”, subrayó la organización.
De hecho, según la ONU, en 2022 se registraron al menos 60 incidentes de seguridad que afectaron directamente a los trabajadores humanitarios, lo que provocó no solo un aumento de los desplazamientos, sino también el “aislamiento” de nuevas ubicaciones en el Sahel, Centro Norte, Este, Norte y Boucle du Mouhoun.
Además, el país sufrió dos golpes de Estado el año pasado: uno el 24 de enero, encabezado por el teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba, y otro el 30 de septiembre, encabezado por el capitán Ibrahim Traoré, actual jefe de Estado.
La toma del poder por parte de los militares se produjo en ambas ocasiones, tras el descontento entre la población y el ejército por los atentados terroristas.
— NNN-ANGOP