HANÓI, 17 de marzo (NNN-VNA) — El mundo conmemoró el sábado los 51 años de la Matanza de My Lai, suceso que conmocionó al mundo y sirvió para evidenciar de lo que fueron capaces las tropas estadounidenses durante uno de los conflictos bélicos más controversiales de la historia: La guerra de Vietnam.
El 16 de marzo de 1968, soldados estadounidenses llegaron a una zona densamente poblada en la costa noreste de Vietnam del Sur, con instrucciones de atacar a combatientes del Frente Nacional de Liberación de Vietnam (Vietcong, insurgentes que luchaban contra el antiimperalismo y buscaban la expulsión de EE.UU. de su territorio). Sin embargo, en esta localidad solo se encontraban civiles desarmados.
Las tropas estadounidenses masacraron a mujeres, ancianos y niños, cortándoles las manos, degollando y asesinando a los aldeanos con disparos y granadas.
El Ejército de los EE.UU. encubrió los asesinatos e hizo de la masacre una victoria a ojos del mundo. El público estadounidense solo se enteró del evento más de un año después, cuando el periodista independiente Seymour Hersh mostró evidencias de la historia y así fue como la masacre de My Lai se convirtió en sinónimo de las atrocidades estadounidenses en el extranjero.
Los hechos de My Lai polarizaron aún más una nación profundamente dividida a fines de la década de 1960. Los estadounidenses que se oponían a la guerra de Vietnam creyeron que la masacre representaba todo lo incorrecto de la participación militar de EE.UU. en tierras extranjeras.
El recuento de los muertos vietnamitas oficiales en My Lai está escrito en una pared de mármol negro en la zona, con los nombres de las 504 personas fallecidas aquel día, que van desde bebés hasta personas de 80 años.
— NNN-VNA