MOSCÚ, 26 dic (NNN-HISPANTV) — El ministro ruso de Finanzas, ha informado que Rusia no suministrará su petróleo a un precio fijado por los países occidentales, aunque eso suba los costos.
“Ahora vemos que nuestras compañías petroleras están redirigiendo sus líneas de suministro del oeste al este y a otros países”, afirmó el domingo el ministro de Finanzas de Rusia, Antón Siluánov, en una entrevista con el medio árabe Al-Sharq.
El ministro se mostró optimista en relación con la búsqueda de nuevos compradores y dijo que “la demanda de petróleo aumentará”. Agregó que Rusia podría tener que reducir la producción de crudo, pero de manera simultánea, buscará “nuevos mercados, lejos de Occidente, así como unas logísticas alternativas, aunque sean más costosas”.
Conforme al ministro, el precio máximo “conducirá sin duda a distorsiones de precios y distorsiones del mercado”. “Mañana los países occidentales establecerán precios máximos para otros productores, algo que no podemos aceptar”, confirmó el alto diplomático, enfatizando que “no suministraremos nuestra principal fuente de energía a unos precios que van a imponer los países de Occidente, no lo vamos a permitir”.
Siluánov aseveró que a pesar de los esfuerzos para limitar los precios, las sanciones y las fluctuaciones de mercado del mercado, se cumplirán todos los compromisos presupuestarios en Rusia.
En la misma jornada, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó en un canal de televisión local, que Rusia nunca va a aceptar estas “distorsión y destrucción del proceso de formación de precios de mercado”.
El techo del precio del petróleo ruso, impuesto por los países de la Unión Europea (UE), el Grupo de los Siete (G7) y Australia, entró en vigor el 5 de diciembre del año en curso. El tope se fijó en 60 dólares por barril. En este sentido, el presidente ruso, Vladímir Putin, se comprometió a firmar un decreto sobre medidas de respuesta contra los países involucrados en esta iniciativa.
— NNN-HISPANTV