WASHINGTON, 25 de mayo (NNN-AGENCIAS) — Un joven de 18 años abrió fuego en una escuela primaria de Texas y mató a 21 personas, entre ellas 15 jóvenes estudiantes y tres adultos.
Se trata de una de las peores masacres en la historia de Estados Unidos, que recuerda la masacre de Sandy Hook de 2012, cuando Adam Lanza, de 20 años, disparó y mató a 26 personas, incluidos 20 niños.
Por ahora no se sabe mucho sobre el asesino, el cual fue abatido durante un intercambio de disparos con los agentes. El atacante, quien llevaba un chaleco antibalas, según los medios locales, fue identificado como Salvador Roma, un estudiante de 18 años del Liceo Uvalde.
El senador de Texas Roland Gutiérrez le dijo a la cadena CNN que el perpetrador del tiroteo en la escuela primaria Uvalde compró el rifle después de haber cumplido 18 años.
El asesino ciertamente estaba armado con una pistola, pero probablemente, dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott, también tenía un rifle.
“Los texanos están de duelo por las víctimas de este crimen sin sentido y por la comunidad de Uvalde”, dijo Abbott, agregando que había dado instrucciones “para que investiguen a fondo este crimen”.
El senador Gutiérrez dijo que los ranger estatales le comunicaron que el número de víctimas del tiroteo en la escuela de Uvalde es más alto que el informado hasta ahora, ascendiendo a 21 muertos, 18 niños y tres adultos.
Poco antes se hablaba de 15 fallecidos, 14 de ellos los estudiantes y un profesor.
A la escuela asistían niños de segundo, tercero y cuarto grado de primaria.
Más de 500 niños estaban inscriptos en la Escuela Primaria Robb, en Uvalde, Texas, es una localidad ubicada entre San Antonio y la frontera con México, según datos estatales.
Las razones del loco gesto aún no están claras. Según los rumores, antes de abrir fuego contra los pequeños alumnos de la escuela primaria habría descargado su ira contra su abuela, hiriéndola.
Las investigaciones se encuentran en las primeras etapas y la policía está trabajando para reunir a los niños con sus padres.
La escena del crimen es grande y probablemente tomará algún tiempo examinarla y tratar de aclarar la dinámica de lo que sucedió.
El presidente Biden fue informado sobre el tiroteo cuando regresaba de Japón, donde estuvo en una gira asiática, según su portavoz, Karine Jean-Pierre.
“Sus oraciones están con las familias afectadas por este terrible evento, y hablará esta noche cuando regrese a la Casa Blanca”, dijo Jean-Pierre.
El área escogida por el asesino es predominantemente hispana. Por ahora ni siquiera se sabe si las armas que usó el atacante fueron compradas legalmente en Texas, un estado republicano donde las restricciones a la tenencia y compra de armas son limitadas.
El incidente está destinado a reavivar el debate sobre las armas de fuego.
El tiroteo, el peor en una escuela desde 2012, en realidad alarga la estela de sangre de los asesinatos en masa en Estados Unidos.
Solo en las últimas semanas, un supremacista de 18 años abrió fuego en un supermercado, matando a 10 personas, en un gesto motivado por el racismo.
— NNN-AGENCIAS
