PARÍS, 2 de abril (NNN-PRENSA LATINA) — La Unesco acompaña a los gobiernos y la sociedad civil en África en la promoción de una cultura de paz que apoye los esfuerzos de desarrollo, señaló el sábado el director general adjunto de la organización Firmin Edouard Matoko.
En entrevista con Prensa Latina, el responsable del ente multilateral para la Prioridad África y las Relaciones Exteriores precisó que en ese objetivo la educación desempeña un papel clave, a partir de la visión de apostar por el protagonismo de las futuras generaciones en la proyección de un mundo diferente.
Hay una voluntad de paz en los jóvenes, ellos no quieren vivir bajo conflictos, de ahí la relevancia del trabajo desde la infancia en función de la convivencia pacífica dentro de la diversidad, expuso en esta capital.
De acuerdo con Matoko, son varios los programas y las recomendaciones de la Unesco para sensibilizar a líderes políticos y respaldar a los actores sociales, sobre la base de las propias decisiones del continente para su renacimiento y transformación, reflejadas en los planes de la Unión Africana y los gobiernos en iniciativas como la Agenda 2063.
Al respecto, destacó eventos realizados en Luanda, Angola, con la participación de diversos componentes de la sociedad civil.
El alto funcionario comentó que los conflictos en África han evolucionado en las últimas décadas, hasta llegar a desafíos como el terrorismo, pero descartó asumir la imagen con frecuencia promovida de que se trata de un lugar violento.
Sembrar la cultura de paz es un trabajo que nunca termina, en África o en cualquier otra parte del mundo, subrayó en su diálogo con Prensa Latina.
Matoko también abordó detalles del acompañamiento de la organización de la ONU especializada en temas de educación, ciencia y cultura al continente en tiempos de la COVID-19, una pandemia que si bien lo golpeó con menor fuerza que a Europa y a otras regiones, generó allí un severo impacto.
Desde los primeros momentos de la crisis sanitaria, la Unesco lanzó la Coalición Mundial para la Educación, en aras de enfrentar las consecuencias del cierre de las escuelas a nivel mundial, declaró.
Según el director general adjunto, en sentido general la iniciativa funcionó bien, tanto en África como en el resto del planeta, al fortalecer la capacidad de los países de garantizar la enseñanza a distancia y de preparar a los maestros para el nuevo escenario.
En este período de pandemia, los estudiantes y sus familiares afianzaron el criterio de la importancia de la escuela, sobre todo en las comunidades rurales, donde hemos potenciado nuestro accionar, manifestó.
— NNN-PRENSA LATINA