PEKÍN, 23 de marzo (NNN-TELESUR) — Las autoridades chinas decretaron en la noche del lunes el confinamiento de Shenyang, polo industrial y ciudad cabecera de la provincia de Liaoning (noreste), donde la presencia de la variante ómicron del SARS-CoV-2 arrojó en esta jornada 47 contagios.
De acuerdo con medios de prensa, se ordenó a los nueve millones de habitantes de la urbe permanecer en sus hogares, de los cuales podrán salir si acreditan el resultado negativo de un test PCR o antígeno tomado en las 48 horas previas.
Liaoning colinda con la provincia de Jilin (noreste), epicentro del actual rebrote de la COVID-19 al que hace frente China, considerado el más fuerte durante dos años en este país de más de 1.400 millones de habitantes.
En el caso de Jilin, el más reciente reporte de la Comisión Nacional de Salud da cuenta de que registró 1.902 contagiados entre los 4.770 casos confirmados el martes a nivel nacional.
Por otra parte, también se conoció que el actual rebrote afecta a 22 demarcaciones chinas, en las que se han reportado más de 41.000 casos de trasmisión local desde el pasado 1 de marzo hasta la fecha.
En las últimas semanas, la estrategia de China de “cero tolerancia” con la pandemia se ha traducido en la aplicación de confinamientos focalizados y pruebas masivas para contener al virus.
Días atrás, el presidente Xi Jinping reiteró la necesidad de minimizar el impacto de la pandemia sobre la economía y recabó mayores esfuerzos de las autoridades locales para impedir nuevos rebrotes o controlarlos en el menor tiempo posible.
Las autoridades siguen con atención la propagación de la COVID-19 en la región administrativa especial de Hong Kong, aquejada por un fuerte rebrote también vinculado con ómicron.
El Gobierno local prevé mantener hasta abril próximo las medidas de distanciamiento social. Además, informó que ya pasó el pico contagioso de la actual oleada, por lo que pronto levantará la prohibición de vuelos desde y hasta nueve países, y quizá se reanuden las clases presenciales.
El viernes pasado se levantó el confinamiento de una semana aplicado en el centro tecnológico de Shenzhen, moderna urbe situada al sureste, la cual conecta a Hong Kong con China continental.
En números totales, la nación asiática contabiliza al menos 11.610 fallecidos y 434.834 casos en su parte continental, Hong Kong, Macao y Taiwán desde el surgimiento de la COVID-19 en diciembre de 2019.
— NNN-TELESUR
