BRASILIA, 15 de marzo (NNN-PRENSA LATINA) — Al menos 38 municipios brasileños afectados por las fuertes lluvias o la sequía prolongada aparecen bajo régimen de emergencia, según establece un decreto publicado en el Diario Oficial de la Unión.
El precepto asegura que estos distritos pueden recibir recursos especiales del Ministerio de Desarrollo Regional.
La publicación indica que los estados de Bahía, Ceará, Rio Grande do Norte, Espírito Santo, Paraná, Rio Grande do Sul, Santa Catarina y Minas Gerais tienen ciudades en estas condiciones.
De los 38 municipios que figuran en la ordenanza, 19 pertenecen a Rio Grande do Sul, que atraviesa un periodo de sequía con altas marcas de temperaturas.
Las urbes de Afonso Cláudio, en Espírito Santo, y Guidoval, en el estado de Minas Gerais (sudeste), fueron clasificadas como situaciones de emergencia por las precipitaciones excesivas.
Con la publicación del decreto, las localidades incluidas en la lista pueden solicitar fondos para restablecer las infraestructuras de los territorios afectados y ayudar a la población.
Para solicitar los fondos, los responsables municipales deben llenar los datos necesarios en el Sistema Integrado de Información sobre Catástrofes.
Tales expedientes serán evaluados por equipos técnicos, junto con el plan de reestructuración y los fondos necesarios.
El portal de noticias G1 asegura que alrededor de 110 estudiantes y 20 empleados fueron abandonados en la escuela estadual Brigadeiro Haroldo Veloso, en Guarulhos, en la región metropolitana de Sao Paulo, después de los aguaceros de este lunes.
De acuerdo con el departamento de educación del territorio, los pequeños y el personal permanecieron «a salvo en el primer piso de la unidad», que está cerca del aeropuerto internacional de Guarulhos.
El cuerpo de bomberos informó que todas las personas fueron desalojadas del colegio a primera hora de la tarde. No hubo víctimas.
Las fuertes lluvias que azotaron la ciudad paulista provocaron inundaciones y dejaron coches bajo el agua en la zona este.
En Artur Alvim, varias calles se inundaron y los comercios tuvieron que cerrar sus puertas.
Los residentes del barrio informaron que el desbordamiento fue causado por la falta de drenaje de las vías, anegadas desde la tormenta que azotó la región el 12 de febrero.
— NNN-PRENSA LATINA