SANTIAGO, 17 de febrero (NNN-TELAM) — El presidente de Chile, Sebastián Piñera, decretó el miércoles el Estado de Excepción en cuatro provincias de la macrozona norte a raíz de la crisis migratoria y la inseguridad, medida que le permite a las Fuerzas Armadas intervenir en tareas internas, entre otros puntos.
La acción “permite a nuestras Fuerzas Armadas colaborar con la policía para controlar la inmigración ilegal”, dijo el mandatario desde el Palacio de La Moneda al anunciar la medida que rige en las provincias de Arica, Parinacota, Tamarugal y Loa.
“Además de generar problemas humanitarios, también genera problemas de seguridad, delincuencia y orden público, y muchas veces es utilizada por verdaderas bandas de crimen organizado para labores de narcotráfico, tráfico de armas, de personas, contrabandos de mercancías y muchos otros males”, argumentó.
La medida se estableció por 15 días y podrá ser renovada por el presidente por 15 días adicionales, mientras que si solicita una nueva extensión la decisión recaerá sobre el Congreso.
El mandatario especificó que la zona ha sido reforzada con 100 carabineros (policía de Chile) y 672 efectivos de las Fuerzas Armadas para la protección de las fronteras “acompañados con mayor, equipamiento y tecnología”.
Está previsto que los efectivos de seguridad realicen patrullajes en conjunto a pie y motorizados, al tiempo que fueron dotados con drones que serán desplegados en la zona, helicópteros para vigilancia y traslado “24/7”, equipos de telecomunicación, monitoreo con visión nocturna y térmica.
Piñera fue enfático al decir “sí a la migración legal” y advirtió que “Chile es un país amistoso, acogedor con los que vienen legalmente, diciendo la verdad y cumpliendo nuestras leyes, pero vamos a usar todos los instrumentos para evitar que aquellos que quieran ingresar en forma ilegal, falseando la realidad, no respetando nuestras leyes, no puedan ingresar a nuestro país”.
Actualmente Chile contabiliza 1,4 millones de inmigrantes, lo que representa más del 7% de su población total, y la comunidad con mayor presencia es la de los venezolanos, seguidos de peruanos, haitianos y colombianos.
El mandatario señaló que la crisis migratoria es un fenómeno mundial y regional y que puntualmente en Chile hay “más de 6 millones de venezolanos que han abandonado ese país por la crisis política, económica, social y humanitaria”.
Durante los últimos meses los pasos del altiplano en el norte -en frontera con Bolivia- han sido la principal ruta de ingreso para inmigrantes irregulares.
El fin de semana pasado se publicó en el boletín oficial el reglamento de la nueva Ley de Migraciones, con el propósito de controlar y frenar los ingresos por pasos no habilitados.
En los últimos días efectivos de seguridad comenzaron con los operativos en la zona y puntualmente en el pueblo fronterizo de Colchane se han efectuado más de 100 traslados de migrantes hacia la frontera con Bolivia.
El presidente chileno también recordó que siguen capacitando a los Carabineros en esta materia, y están planificadas nuevas expulsiones de inmigrantes ilegales para las próximas semanas.
— NNN-TELAM