ADÍS ABEBA, 24 de diciembre (NNN-PRENSA LATINA) — Todas las zonas de la región de Afar y del este de Amhara fueron liberadas de la ocupación del Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF), informó el jueves el portavoz del gobierno de Etiopía, Legesse Tulu.
Ese era el objetivo de la primera fase de la Operación por la unidad en la diversidad, dirigida por el primer ministro, Abiy Ahmed, y podemos decir que fue completada con éxito, dijo Tulu, quien leyó un comunicado durante una comparecencia televisiva.
Debemos resaltar la valentía de las fuerzas regionales de Afar y Amhara, importantes en el triunfo contra la junta terrorista, pero todos los etíopes son ganadores en esta guerra, manifestó.
Según explicó, el gobierno ordenó al ejército que mantenga un bastión en las áreas rescatadas, aunque no reveló las razones por las cuales no continúa su marcha hacia Tigray, territorio donde estalló el conflicto armado.
También anunció que las huestes federales continuarán sus operaciones contra Shene en la región de Oromía, estado ubicado en el oeste etíope y centro de la actividad criminal de esa organización.
Acusado de masacrar civiles, sabotajes y destrucción de propiedades e infraestructuras, entre otros delitos, Shene fue inhabilitado para participar en las pasadas elecciones generales y en mayo último el Parlamento lo designó terrorista, junto con el TPLF (siglas en inglés).
Luego del ataque de las fuerzas tigriñas al Comando Norte del ejército, Ahmed decidió iniciar una ofensiva militar el 4 de noviembre de 2020 para reducirlas y establecer el orden constitucional en la jurisdicción.
Desde el 23 de noviembre pasado, el jefe del Gobierno lidera las operaciones contra el Frente, que en junio último aprovechó un alto al fuego de las autoridades federales para extender la guerra a Afar y Amhara.
A partir de entonces, cuando presumiblemente los insurgentes estaban en posición de invadir Addis Abeba, sobrevino el avance del ejército y la liberación de muchos asentamientos, incluidos Asagita, Dessie, Lalibela y Kombolcha, entre otros.
No obstante la victoria anunciada el jueves, más de un año después el conflicto prosigue y con él crece el saldo de muertos, desplazados, damnificados y daños materiales, la mayoría por la criminalidad del grupo, de acuerdo con acusaciones oficiales.
— NNN-PRENSA LATINA
