BRASILIA, 3 de diciembre (NNN-AGENCIAS) — La gobernación de Brasilia, la capital de Brasil, confirmó dos pacientes infectados con la cepa Omicron del coronavirus y la alcaldía de San Pablo anunció la suspensión de los festejos de Año Nuevo, una tendencia que se repite en otras jurisdicciones.
“Confirmado, hay dos casos”, declaró el gobernador de Brasilia , Ibaneis Rocha, en la tarde de el jueves ante la consulta del diario Correio Brraziliense.
Uno de los pacientes es un hombre llegado de Africa del Sur, que antes de aterrizar en Brasilia hizo escala en San Pablo.
El hombre había dado positivo en el test PCR el lunes pasado y desde entonces se encuentra aislado y monitoreado en la Capital Federal.
De este modo llega a cinco, tres en San Pablo y dos en Brasilia, el número de brasileños contaminadas con esa variante surgida en Africa.
Paralelamente las autoridades sanitarias de Rio de Janeiro mantienen en observación a una mujer infectada que llegó de Africa, mientras continuaban los estudios sobre las muestras que le fueron extraídas.
Ante la aparición de esta nueva cepa la Alcaldía de San Pablo determinó dejar sin efecto los multitudinarios festejos de Año Nuevo en la Avenida Paulista, evento que suele convocar a más de 1 millón de personas.
El alcalde paulistano, Ricardo Nunes, dijo el jueves que es necesario “hacer un monitoreo (del cuadro sanitario) y el plazo es muy corto hasta el Reveillon”.
Tampoco habrá festejos del Reveillon en Brasilia, Salvador de Bahia, Belo Horizonte, Curitiba y Porto Alegre, entre otras capitales.
El alcalde paulista Nunes ya había declarado días atrás que con la presencia de la nueva cepa habían crecido las chances de que el Reveillon, e incluso el Carnaval, fueran suspendidos.
Respecto del “Carnaval puedo decir que tomaremos la decisión más adelante, enfatizando que nos basaremos en las decisiones de los profesionales de la Vigilancia Sanitaria”, señaló el jefe de gobierno comunal de la metrópolis más importante del país.
Nunes se encuentra en Nueva York, junto al gobernador de San Pablo, Joao Doria, que también es favorable a la adopción de medidas para impedir la diseminación de la nueva cepa.
“Estamos en el camino de la cautela y de actuar con celo en la protección de las vidas, no es hora de hacer las fiestas del Reveillon”, declaró el gobernador paulista Doria.
“Pese a que la decisión de Reveillon es competencia de las alcaldías, me parece que no es la hora adecuada”, de organizar los eventos de fin de año, destacó el gobernador al hablar ante un grupo de inversores en Nueva York.
— NNN-AGENCIAS