SANTO DOMINGO, 22 de noviembre (NNN-TELESUR) — El Grupo de Apoyo a Refugiados y Repatriados (GARR) de Haití, denunció el sábado que República Dominicana ha deportado hasta el 18 de noviembre unos 1.541 haitianos, entre ellos 153 embarazadas, nueve madres lactantes y 128 niños.
Según la plataforma que lucha por el respeto a los derechos humanos de los migrantes, las deportaciones continúan pese a la visita de un representante del gobierno haitiano a Santo Domingo y la promesa de cesar este proceso.
“De hecho, el 17 y 18 de noviembre de 2021, al término de la misión de Daniel Supplice, los agentes migratorios dominicanos repatriaron a un total de más de 400 personas a Ouanaminthe (Nordeste) y Belladère (Centro)”, señal el comunicado del GARR.
De los repatriados se encontraba un estudiante de Ciencias de la Salud, originario de Cabo haitiano, localidad del extremo norte del país.
Por otra parte, la Fundación Zanmi Timoun, criticó que inicios de 2021, los agentes dominicanos deportaron a 214 niños sin acompañantes a través de los puntos oficiales, y 84 por los no oficiales. Según la fundación esto viola los derechos más elementales de la infancia.
En las últimas semanas, República Dominicana y Haití han vivido tensiones, a las que se suma el incremento de las deportaciones de haitianos, quienes denunciaron ser víctimas de maltrato físico y las mujeres de agresiones sexuales.
“El GARR está profundamente consternado por el trato inhumano al que han sido sometidas estas personas, especialmente mujeres y niños”, expresó el grupo, mientras recogieron testimonios de las víctimas de represión con gases lacrimógenos y de abuso sexual por parte de los soldados dominicanos.
Santo Domingo suspendió el programa de visado para estudiantes haitianos y prohibió la atención a ciudadanos irregulares en los hospitales públicos para frenar la inmigración. Además, se reforzó el control en la frontera con Haití.
Según las autoridades, estas disposiciones se deben al aumento de la inseguridad en el país vecino, sin embargo, los haitianos consideran que es parte de una política racista de Dominicana.
— NNN-TELESUR
