BERLÍN, 10 de noviembre (NNN-TELAM) — Alemania informó el martes un nuevo récord de la incidencia acumulada semanal por el coronavirus, tras superar por primera vez la barrera de los 200 casos por cada 100.000 habitantes en lo que las autoridades han llamado una “pandemia de los no vacunados”.
La nueva incidencia semanal récord de más de 230 se conoció en coincidencia con la publicación de un sondeo según el cual una mayoría de consultados apoya mayores restricciones a quienes se han negado a vacunarse.
Así lo informó el Instituto Robert Koch (RKI), el ente gubernamental encargado del control de enfermedades infecciosas, en una publicación en su página web en la que precisa que la cifra trepó a 213,7 casos por cada 100.000 habitantes, por encima de los 201,1 casos notificada el lunes.
El organismo agregó en su actualización que durante las últimas 24 horas se detectaron 21.832 casos y 169 muertos, lo que sitúa los totales en 4.804.378 y 96.727, respectivamente, desde el inicio de la pandemia, informó la agencia de noticias alemana DPA.
Asimismo, el RKI indicó que en estos momentos hay cerca de 310.100 casos activos, unos 4.100 más que el día anterior, y que 4.397.600 personas se recuperaron hasta ahora de la COVID-19, incluidas alrededor de 17.600 altas durante el último día.
El país europeo confirmó el viernes pasado por primera vez más de 37.000 contagios diarios desde el inicio de la pandemia, en el marco de un repunte que hizo saltar las alarmas.
Las autoridades han dicho que el rebrote en Alemania, su cuarta ola de contagios, es básicamente una “pandemia de los no vacunados”, ya que la inmunización contra el coronavirus avanzó rápidamente, pero se estancó en semanas recientes en el 70% de la población.
Una encuesta publicada el martes por DPA mostró que un 31% de los consultados se pronunció a favor de aplicar con mayor dureza la normativa conocida como 2G, que limita el ingreso a determinados lugares, como cines, restaurantes o conciertos, exclusivamente a personas vacunadas o recuperadas de COVID-19.
Otro 25 por ciento de los encuestados por la consultora YouGov respaldó que la regla 2G se aplique de forma uniforme en todo el país.
En cambio, el 19 por ciento apoyó que los no vacunados que cuenten con un resultado negativo en un test de coronavirus estén en igualdad de condiciones con las personas vacunadas en cuanto a las normas de acceso, tal como lo establece la normativa 3G, que se aplica ciertas situaciones en Alemania.
El 18 por ciento se manifestó a favor de que se supriman todas las restricciones de acceso.
Austria, un país vecino a Alemania y muy vinculado a ella culturalmente, dispuso la aplicación generalizada de la regla 2G en todo el país para el acceso a bares, gimnasios, eventos y peluquerías debido al fuerte aumento de los contagios con coronavirus.
Sin embargo, en Alemania no existe una normativa uniforme.
Hasta ahora, Sajonia es el único estado federado que aplica obligatoriamente la norma 2G en todos los ámbitos de la vida pública.
Allí, solo los recuperados de COVID-19 y los vacunados tienen acceso al interior de los restaurantes, las discotecas o las instalaciones de ocio y cultura.
Los grandes eventos, como los partidos de fútbol en los estadios, también se ven afectados.
En otros estados federados alemanes se dejó librada la aplicación de la normativa 2G a la decisión de los operadores de cada restaurante y los organizadores de cada evento, lo cual genera una situación controvertida. Algunos expertos critican que esta política genera entre la gente una falsa sensación de seguridad porque incluso las personas vacunadas podrían infectarse y transmitir el virus.
Por ello, piden que se realicen test periódicos a los vacunados y recuperados, especialmente en los lugares donde viven personas especialmente vulnerables, y que estas pruebas se ofrezcan otra vez de forma gratuita a todos.
Actualmente solo se realiza el test de forma gratuita a quienes no pueden vacunarse, ya sea porque son menores de 12 años o tienen alguna excepción, entre otras causas.
— NNN-TELAM