PUERTO PRÍNCIPE, 18 de agosto (NNN-ANDINA) — Alrededor de 540,000 niñas y niños han sido afectados por el terremoto que sacudió Haití el sábado 14 de agosto y, de momento, en medio de la emergencia, solo tienen acceso limitado o nulo a refugio, agua potable, atención médica y nutrición, alertó el martes Unicef.
Tras el sismo de magnitud 7.2, los departamentos más afectados de Nippes, Sur y Grand’Anse “ahora son impactados por la depresión tropical Grace, que interrumpe todavía más el acceso al agua y otros servicios básicos”, añadió el organismo, en un despacho informativo desde Puerto Príncipe.
Las inundaciones y deslizamientos de tierra podrían empeorar la situación de las familias vulnerables y complicar la respuesta humanitaria.
Todavía se hacen labores de búsqueda y rescate, “con informes oficiales de más de 1,400 muertos y 7,000 heridos; además, más de 84,000 viviendas han resultado dañadas o destruidas, al igual que diversas infraestructuras públicas, incluidos hospitales, escuelas y puentes”, precisó Unicef.
El representante de la organización en Haití, Bruno Maes, describió desde la localidad de Les Cayes la complejidad del panorama: “Anoche pude ver y sentir fuertes vientos y lluvias en las mismas áreas que ya fueron afectadas por el terremoto”.
“Innumerables familias haitianas que lo han perdido todo debido al terremoto ahora viven literalmente con los pies bajo el agua debido a las inundaciones”, relató Maes.
Más aun, la violencia y la inseguridad complican la respuesta humanitaria, y “la carretera principal de Puerto Príncipe hacia el sur del país está controlada por bandas”, agregó el informe de prensa desde la capital haitiana.
Sin embargo, Unicef pudo llegar a las zonas afectadas con suministros médicos pocas horas después del terremoto.
Un camión de este organismo, por ejemplo, entregó cargamentos médicos a tres hospitales en Les Cayes, con suministros suficientes para tratar a 30,000 víctimas del terremoto durante tres meses, incluidos guantes, analgésicos, antibióticos y jeringas.
Con apoyo de sus aliados, Unicef distribuye también lonas para albergues de emergencia, letrinas y duchas; depósitos para la distribución de agua potable y segura; y kits de higiene que incluyen pastillas para el tratamiento del agua, jabón, material de higiene menstrual y bidones.
“Se movilizarán rápidamente suministros adicionales, incluidos kits educativos y recreativos y Unicef está planificando actividades de participación comunitaria para evitar la separación familiar y garantizar la protección y el apoyo psicosocial de los niños y niñas”, añadió el reporte.
Frente a la crisis, la institución calcula que necesitará 15 millones de dólares para responder a las necesidades más urgentes de al menos 385,000 personas, incluidos 167.000 niños y niñas menores de cinco años, durante un período de ocho semanas.
“Esta petición de fondos inicial se revisará y ajustará en las próximas semanas a medida que se aclare el impacto en los niños, niñas y las familias”, informó Unicef desde Puerto Príncipe.
— NNN-ANDINA
