KUALA LUMPUR, 23 de junio (NNN-BERNAMA) — El periódico más antiguo de Malasia ha pedido a las Naciones Unidas (ONU) que cambie la hipocresía de las grandes potencias en el organismo mundial que permite que sigan ocurriendo masacres y genocidios en el mundo.
El New Straits Times, de 176 años de antigüedad, también posiblemente uno de los más antiguos del mundo, en un editorial punzante dijo hoy que la hipocresía de las grandes potencias y el fracaso de la propia ONU son dos razones por las que continúan ocurriendo tales atrocidades.
“Las instituciones internacionales también le han fallado al mundo. La ONU es un epítome de tal fracaso”, dijo.
Al ser una creación de Occidente, el NST dijo que la ONU fue diseñada para fallar al resto porque ¿de qué otra manera podría explicarse que los cinco miembros permanentes (P5) del Consejo de Seguridad de la ONU (CSNU) deciden el destino de los otros 195 países miembros y territorios?
El P5 incluye a Estados Unidos, Rusia, China, Reino Unido y Francia.
Al decir que la democracia muere mil muertes en el organismo mundial, la Asamblea General de la ONU (AGONU) con una membresía tan grande tampoco puede dar a sus resoluciones fuerza de ley a diferencia de las del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
“La hipocresía, como la mala sangre de los miembros fundadores de la ONU, fluye por las venas de las instituciones internacionales. La hipocresía se puede acabar de dos maneras: los P5 entran en razón y enmiendan sus caminos descarriados o la AGONU actúa para cambiar el universo hipócrita de los P5”.
NST señaló los dos niveles de hipocresía de las grandes potencias: un nivel es el conjunto de pruebas que apuntan a las atrocidades cometidas por sus fuerzas armadas y mercenarios a sueldo.
En otro nivel hay igualmente un conjunto de pruebas que apuntan a los crímenes de guerra de los aliados.
En ningún nivel un tribunal o corte internacional puede tener acceso a pruebas porque las grandes potencias siempre están al acecho para cortar las investigaciones de raíz.
Citó como ejemplo el intento de la Corte Penal Internacional (CPI) de abrir investigaciones sobre crímenes de guerra presuntamente cometidos por soldados estadounidenses en Afganistán, y agregó que Estados Unidos incluso advirtió a la CPI que no volviera a intentarlo.
Esto sucedió nuevamente cuando la CPI intentó recientemente abrir investigaciones sobre presuntos crímenes de guerra contra Israel y para poner fin a su opresión institucionalizada de los palestinos, lo que enfureció a Estados Unidos, incluido su presidente Joe Biden.
“¿Qué pasó con el orden mundial basado en reglas?”, preguntó el NST.
— NNN-BERNAMA
Por Azman Ujang