DAMASCO, 3 de mayo (NNN-AGENCIAS) — A menos de un mes de las elecciones, el presidente de Siria, Bashar al-Assad, ordenó una amnistía por decreto para los detenidos, liberando no solo a las personas condenadas por delitos menores, sino también a las condenadas por “complicidad en actos de terrorismo”.
Entre estos últimos, en la jerga del régimen sirio, están las actividades de los rebeldes, pero también de los activistas contra el gobierno de Damasco.
También se incluyen en la amnistía a desertores del ejército que se han constituido en ese rango en tres meses, o seis meses si se encontraban en el extranjero.
Por otro lado, aquellos “terroristas” cuyas acciones hayan causado la muerte no se beneficiarán de la indulgencia. En cuanto a los responsables de determinados delitos como el narcotráfico, el contrabando y la evasión fiscal, la liberación estará sujeta al pago de una multa.
De cara a las elecciones presidenciales del 26 de mayo, las segundas desde el estallido de la guerra civil, no se esperan grandes sorpresas y Assad parece proyectarse sin demasiados obstáculos hacia un cuarto mandato.
Se estima que diez años de guerra civil en Siria han provocado al menos 380.000 muertes y millones de desplazados.
— NNN-AGENCIAS