KABUL, 30 de enero (NNN-HISPANTV) — Al menos ocho soldados fueron asesinados en un ataque suicida con coche bomba contra una base militar en la provincia nororiental afgana de Nangarhar.
El atentado ha tenido lugar el sábado por la mañana (horal local) en la provincia de Nangarhar, en el noreste de Afganistán, donde un atacante suicida impactó su vehículo cargado de explosivos contra una base militar de la zona. El acto se saldó con la muerte de al menos ocho soldados.
“Esta mañana, los terroristas usaron un Humvee cargado de explosivos […] Ocho miembros de las fuerzas de seguridad murieron”, ha declarado la oficina del gobernador de la provincia de Nangarhar en un comunicado.
Mientras tanto, Ajmal Omar, diputado en el consejo provincial, habló por su parte de 15 muertos y cinco heridos.
Horas después del atentado, el grupo armado Talibán se ha atribuido la responsabilidad por el acto de violencia.
Este repunte de la violencia tiene lugar un día después de que Estados Unidos anunciara que la salida de sus tropas de Afganistán podría detenerse, pues Talibán “no está cumpliendo” con el acuerdo de paz.
En respuesta, Mohamad Naeem, un portavoz del grupo armado declaró el mismo viernes que los talibanes se comprometieron a respetar el llamado acuerdo de paz firmado en Doha, capital de Catar, y “no violaron este pacto”. Entretanto, denunció la violación “casi a diario” por EE.UU. del pacto al llevar a cabo “bombardeos contra civiles” afganos.
EE.UU. y Talibán habían firmado el 29 de febrero de 2020 un acuerdo de paz para la salida de las fuerzas estadounidenses de Afganistán, según el cual, el país norteamericano debe reducir el número de sus militares a 8600.
Transcurridos más de 19 años del inicio de la invasión de Afganistán por las tropas estadounidenses y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), la inseguridad sigue reinando en el territorio afgano y ha coadyuvado a la expansión de grupos extremistas, como Daesh.
— NNN-HISPANTV
