LA HABANA, 5 de octubre (NNN-AGENCIAS) — Las autoridades cubanas abrirán al turismo internacional la playa de Varadero el próximo día 15 un destino crucial para el sector en un momento en que buscan una “nueva normalidad” en el control de la COVID-19.
El anuncio del Ministerio del Turismo de Cuba coincidió con estadísticas menos severas de la epidemia.
El domingo se reportaron 29 nuevos casos con 4,942 personas hospitalizadas o confinadas en centros de aislamiento bajo vigilancia epidemiológica con 540 ciudadanos contagiados con la COVID-19.
El gobierno, que busca reactivar la golpeada economía nacional con el turismo como una de sus ramas cruciales, “flexibilizó” las restricciones en La Habana, cuya “normalidad” es imprescindible para una restauración. A cuatro días de esas nuevas condiciones, la ciudad, que ha sido el epicentro de la epidemia en la isla desde fines de julio, reportó 12 de los 29 contagiados en las ultimas horas.
Con 15 nuevos enfermos en dos provincias del centro del país, Sancti Spíritus con 11 y 4 en Ciego de Ávila todo parece indicar que la peor parte de la epidemia ahora se desarrolla en esa región.
El balneario de Varadero está a 110 kilómetros al este de la Habana y tiene su propio aeropuerto cercano, aunque está muy vinculado a la capital por autopistas en cuanto a arribos de extranjeros, en tiempos normales.
La terminal aérea internacional de la playa “se encuentra lista para reanudar todas sus operaciones y están establecidos los protocolos de bioseguridad para recibir a los visitantes” se anunció.
Por el momento la apertura de la playa es parcial.
Serán recibidos por el momento clientes en hoteles de cuatro y cinco estrellas con excursiones marítimas, de naturaleza y otras actividades, dentro de una zona aprobada.
Se aplicarán además medidas especiales de prevención médica con profesionales especialmente asignados Se informó que los turistas pagarán solamente con tarjetas de créditos. Se explicó que la medida se debe a evitar la manipulación de dinero en efectivo.
El turismo es crucial para la economía de la isla.
La economía de Cuba estaba en problemas antes del coronavirus. El gobierno de Donald Trump ha trabajado duro para fortalecer el embargo comercial que lleva décadas y ha ido tras las fuentes de divisas de Cuba.
Washington también sancionó a las compañías de buques petroleros que entregaban petróleo a Cuba desde Venezuela y redujo los vuelos comerciales de Estados Unidos a la isla.
El mes pasado, el secretario de Estado Mike Pompeo anunció también el fin de los vuelos chárter. Después de que la compañía energética estatal cubana Corporación Panamericana fue sancionada, incluso las raciones de gas de cocina tuvieron que reducirse.
— NNN-AGENCIAS
