LIMA, 1 de octubre (NNN-PRENSA LATINA) — Dos importantes organizaciones sindicales y la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos de Perú se pronunciaron contra la criminalización de las protestas sociales, en una conferencia que trató el tema.
La reunión, organizada con motivo de la Semana Nacional de los Derechos Humanos que culminó el miércoles, congregó a la citada agrupación de colectivos humanitarios, la Confederación General de Trabajadores (CGTP) y la Federación de Trabajadores de la Construcción.
Los participantes coincidieron en condenar la represión y el uso de mecanismos penales contra protestas sociales y en particular sindicales, que expresan descontento y que son parte de los derechos ciudadanos.
El secretario general de la CGTP, Gerónimo López, condenó las ‘denuncias penales preventivas’ que, dijo, utiliza el Gobierno para amedrentar a quienes organizan protestas.
‘Mientras los trabajadores lidian contra la COVID-19 y el hambre, son amenazados con la cárcel si salen a protestar’, dijo el líder de la principal central obrera del país.
Coincidió con los demás participantes, además, en la condena a la violencia contra los defensores de los derechos humanos
El secretario general de la Federación de Trabajadores de la Construcción de Perú, Luis Villanueva, denunció el grave problema de la delincuencia organizada que extorsiona, bajo amenazas de muerte, a empresarios y trabajadores del sector, y cuando los obreros reaccionan, los asesinan.
‘Un total de 19 dirigentes sindicales han sido asesinados por estas mafias desde el año 2011’, señaló y agregó el hecho que, además, los trabajadores sufren la represión que utiliza las leyes que criminalizan la protesta y el uso excesivo de la fuerza policial.
Mar Pérez, representante de la Coordinadora de Derechos Humanos, advirtió que ‘cuando se criminaliza a los dirigentes como represalia por su labor’ se afecta ‘la médula misma de la democracia’
Añadió que los sindicatos son defensores de derechos humanos y denunció que algunos funcionarios estigmatizan a los dirigentes como violentos y agitadores, lo que contraviene los estándares internacionales.
La activista humanitaria llamó a la unidad de los trabajadores y la sociedad civil organizada ‘sobre cuyas espaldas se ha construido este modelo (neoliberal) que ha dado resultados desastrosos’.
— NNN-PRENSA LATINA