BRUSELAS, 23 de septiembre (NNN-AGENCIAS) — El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, prisionero de la cuarentena por coronavirus, decidió postergar la cumbre extraordinaria de los 27 líderes de la UE, prevista para el jueves y viernes próximos, a la semana próxima, más precisamente al 1 y 2 de octubre.
La noticia llegó en forma sorpresiva, gracias al perfil en Twitter del vocero de Michel, Barend Leyts, en la tarde del martes.
“El presidente del Consejo supo que un adscrito a la seguridad, con el que estuvo en contacto cercano a comienzos de semana, dio positivo al coronavirus. El presidente se somete regularmente a hisopados, y el lunes dio negativo. En observancia a las leyes de Bélgica, está en cuarentena desde hoy”, se lee en el mensaje retuiteado inmediatamente por centenares de cuentas, con una anulación en cascada de todas las citas previstas en preparación de la cumbre.
Michel, que había convocado la cita para el 24 y 25 de setiembre, particularmente para afrontar el espinoso dossier de las relaciones entre la UE y Turquía, y para contribuir a aflojar las tensiones en el Mediterráneo oriental, acogió la noticia del contagio de su guardaespaldas, mientras se hallaba en la oficina, luego de una prometedora videoconferencia con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y la jefa del gobierno alemán, Angela Merkel.
Un encuentro, si bien virtual entre los tres políticos, que pareció reencaminar el diálogo entre Ankara y Atenas, con posibles efectos positivos para Nicosia.
Y justamente el martes el Consejo de Asuntos Generales, organizado en vista de la cumbre, entre los varios temas (entre ellos las relaciones estado de derecho para cada país de la UE, que la Comisión Europea presentará la semana próxima por primera vez en su historia), los ministros discutieron la necesidad de coordinar las medidas sobre libre circulación en el área Schengen en época de pandemia. Reglas a las que el presidente del Consejo Europeo no pensó siquiera por un instante sustraerse.
Superado un primer momento de desilusión, Michel (que la semana pasada mantuvo reuniones con los premieres griego, Kyriakos Mitsotakis, el maltés Robert Abela, y el chipriota Nikos Anastasiades) se puso rápidamente en contacto con la presidencia de turno alemana y con la red de los sherpa, para informar lo ocurrido y reprogramar el evento, que en las intenciones del líder tendrá igualmente en persona.
La cuarentena, según lo previsto por las reglas de Bélgica, por el momento no se aplica al staff de Michel, que transcurrirá un período de aislamiento en casa, hasta que venzan los 14 días previstos por las normas (el contagio de la persona de seguridad data de la semana pasada), cuando se someterá a nuevos test antes de retornar a la vida pública.
Semanas atrás, la falta de observancia de las leyes irlandesas anti-COVID obligó a Phil Hogan a renunciar a su cargo de comisario europeo para el Comercio.
— NNN-AGENCIAS
