PARÍS, 12 de septiembre (NNN-TELESUR) — Los chalecos amarillos salieron de nuevo a las calles de varias ciudades francesas, tras varias pausas por la COVID-19, y la vacaciones de verano, para protestar contra el sistema de pensiones y otras demandas de carácter social.
Casi dos años después de sus primeras movilizaciones, el movimiento a regresado a las calles con una serie de acciones tanto en la capital como en ciudades como Marsella, Toulouse, Lyon, Lille, Nantes, Niza, Burdeos o Estrasburgo.
La movilización de este 12 de septiembre se produce en un contexto social marcado por una profunda crisis económica y el ataque directo a las condiciones laborales de muchos trabajadores franceses, en medio de la pandemia de COVID12.
En forma previa, Jérôme Rodrigues, uno de los líderes históricos del movimiento, llamó a sus partidarios a salir a las calles, pese a las restricciones impuestas por el coronavirus, e instó a una “desobediencia civil completa”.
Por su parte, la Prefectura de París indicó el sábado que 193 personas habían sido detenidas a primera hora de la tarde al margen de la manifestación de los chalecos amarillos por llevar objetos peligrosos.
Las fuerzas de seguridad han empleado gas lacrimógeno contra los manifestantes, que han incendiado mobiliario urbano para dificultar el paso de los vehículos en el noroeste de París.
Antes del inicio de las manifestaciones, la policía desplegó un operativo especial en París y detuvo a más de 80 personas.
La Prefectura de Policía ha rechazado las dos marchas en los alrededores de los Campos Elíseos y ha permitido en cambio dos, una entre la plaza de la Bolsa y la Porte de Champerret (noroeste), y otra entre la plaza de Wagram y la plaza de Saint-Pierre, delante de la iglesia del Sagrado Corazón.
“La misión de la Prefectura de Policía: encuadrar las manifestaciones declaradas para garantizar la libertad de expresión, detener a los autores de infracciones y requisar objetos peligrosos. A las 13H00 horas locales (11H00 GMT), 154 detenidos”, indicó en su cuenta de Twitter.
El mensaje iba acompañado de una fotografía en la que aparecen martillos, una barra de madera, un palo de metal y un cuchillo, tras mostrar en una foto previa caretas, botellas de alcohol, tonillos y otras herramientas.
En el regreso de los chalecos amarillos el sábado, por primera vez después del período estival, las marchas congregaron a miles de personas en distintos puntos de la capital parisina, pero también en menor medida en otras capitales de provincia del país.
El líder opositor de izquierda Jean-Luc Mélenchon felicitó a los chalecos amarillos por la movilización. “Bravo por los insumisos presentes en la manifestación de los chalecos amarillos”, publicó Mélenchon en Twitter en un mensaje en el que apeló a la calma.
— NNN-TELESUR
