PARÍS, 10 de agosto (NNN-TELESUR) — El Gobierno de Francia estimó el domingo una pérdida económica en el sector turístico de 47.000 millones de dólares, aproximadamente, a causa de la pandemia de la COVID-19.
El secretario de Turismo, Jean-Baptiste Lemoyne, señaló que en condiciones normales, el turismo genera unos 212.000 millones de dólares, de los cuales, la tercera parte son gracias al turismo internacional, casi ausente en su totalidad por el cierre de fronteras.
Lemoyne, en sus declaraciones, dijo que la clientela internacional “ha desaparecido” y muchos turoperadores han previsto una caída que ronda entre el 20 y el 25 por ciento para finales del actual año, sobre todo de los mercados chino, ruso y estadounidense.
En contraste, ya habría, según el titular, un aumento progresivo de turistas holandeses, alemanes, belgas y suizos; países limítrofes los cuales si bien no han logrado contener la pandemia, sí han abierto sus fronteras con Francia.
El secretario de la cartera de Turismo explicó que “uno de cada dos hoteles está cerrado y el Louvre recibe 10.000 visitantes al día en lugar de 50.000, pero espero que la reanudación a partir del 1 de septiembre de las grandes ferias y salones profesionales permitirá a la capital volver a encender uno de sus motores económicos”.
No obstante los malos resultados del turismo internacional, el dirigente gubernamental, adelantó que el nacional ha tenido un “un julio alentador” por lo cual espera que “que agosto sea excelente”; aunque pidió a los franceses ser cuidadosos, respetar la distancia social y usar el tapabocas.
La pandemia de la COVID-19 ha hecho estragos no solo en los sistemas sanitarios de todo el mundo, sino en la economía mundial, y el primer sector en sentir los efectos de fue el del turismo, motivado por el cierre de las fronteras, alargado en el tiempo, debido a la imposible, hasta ahora, contención del virus.
— NNN-TELESUR
