PANAMÁ, 19 de julio (NNN-PRENSA LATINA) — La mitad de la población de Panamá amaneció el sábado bajo una estricta cuarentena absoluta que incluyó a la capital y su vecina provincia Panamá Oeste, como polémica medida para reducir la trasmisión de COVID-19.
La semana que concluyó el sábado batió todos los récords estadísticos de la pandemia en contagiados, muertes, tasas de positividad de las pruebas realizadas e ingresos hospitalarios, sin que una estrategia visible prometa un control para revertir la situación, según especialistas de la salud.
En el último reporte, los infectados alcanzaron los 51 mil 408 y los fallecidos mil 38, pero el lunes pasado se registró el día de mayor cantidad de infectados con mil 540 y la semana amenaza con batir la marca en ese indicador, mientras ayer hubo el récord de defunciones en 24 horas con 38 y los ingresados llegaron a mil 284 el viernes.
En el último mes afloran las protestas públicas de trabajadores de los hospitales que reclaman medios de protección e insumos, mientras directivos del sistema sanitario reiteraron contar con los abastecimientos necesarios y que solo se trata de un problema local.
Esporádicas comparecencias públicas del presidente del país, Laurentino Cortizo, el ministro de Salud, Luis Fernando Sucre y otras autoridades, intentan convencer de que el gobierno mantiene el control de la situación y toma todas las medidas por mitigar las consecuencias, al tiempo que desestiman las críticas y llaman a la unidad.
Esta semana Sucre anunció que el país buscó intercambios con el equipo que enfrenta la pandemia en Singapur, además con la embajadora de Cuba en esta capital Lydia Margarita González, otros funcionarios de esa sede y posteriormente sostuvo una reunión virtual con su homólogo cubano, José Ángel Portal.
Aunque no ofreció detalles de los diálogos, una nota oficial del gobierno señaló que ‘durante estas reuniones el ministro intercambió experiencias médicas, científicas, sociales y económicas que se aplicaron en estos países para el combate efectivo del COVID-19’.
Cortizo, a su vez, en una aparición pública reciente afirmó que hacen gestiones para negociar previamente la adquisición de una vacuna contra la enfermedad, entre las opciones de los laboratorios que dicen estar avanzados en el desarrollo de un inmunizador y mencionó la británica Universidad de Oxford.
— NNN-PRENSA LATINA