PARÍS, 15 de julio (NNN-AGENCIAS) — En formato reducido, con distancia social y sin público, se realizó el martes el desfile militar en Champs-Elysees para conmemorar el 14 de julio de 1789, cuando tuvo lugar la toma de la Bastilla, que marcó el fin de la monarquía absoluta en Francia.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, estuvo acompañado por su esposa, Brigitte y de todos sus ministros en una ceremonia que duró un cuarto de hora, en virtud de las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus. Solo hubo 2.500 militares y estuvieron presentes como invitados 1.400 integrantes del personal sanitario, “héroes” de la batalla contra el Covid-19.
Los militares desfilaron a pie, respetando el distanciamiento social. Solo se verá completo el espectáculo de la Patrouille de France, los aviones que despiden humo con los colores de la bandera francesa que se dibujará en el cielo de París. Luego, volarán los helicópteros que participaron -en el momento más grave de la pandemia- en las operaciones de transporte de los enfermos de coronavirus.
En su discurso por televisión, Macron reivindicó “las cifras” que, sobre la crisis del coronavirus, demuestran que “Francia está lejos de haber sido el peor” pero, dijo, los franceses “tenemos una duda permanente sobre nosotros mismos como país”.
El mandatario dijo, también, que a partir del 1 de agosto el uso de la mascarilla será obligatorio en los lugares públicos cerrados. “Recomiendo a nuestros ciudadanos usar tapabocas en el exterior y, con más razón, cuando se encuentren en un sitio cerrado”, subrayó. Y, lo más importante, habló del plan de relanzamiento de la economía francesa tras la pandemia que demandará “al menos 100 mil millones de euros” que se suman a los 460 mil millones ya movilizados para medidas sectoriales y de apoyo a la economía desde el inicio de la crisis por el coronavirus.
“Con este plan de relanzamiento, sumamos más inversiones, al menos 100 mil millones para la reactivación industrial, ecológica, cultural y educativa. Estoy convencido que se podrá construir un país diferente dentro de diez años”, afirmó. En la entrevista televisiva Macron prometió, además, “un dispositivo excepcional de excepción de impuestos para el trabajo para los jóvenes, en particular para los menos calificados o los salarios más bajos”.
Por otra parte, con la intención de preparar el encuentro europeo del 17 y 18 de julio, el mandatario francés recibirá hoy en el Eliseo, a pesar de la jornada de celebración, al presidente español, Pedro Sánchez, y al premier sueco, Stefan Lofven, anunció hoy la presidencia. Macron llegará a Bruselas el jueves por la noche, en vísperas del encuentro que deberá tomar decisiones cruciales sobre el plan de relanzamiento de 750 mil millones de euros por el cual luchan Italia, Francia y Alemania.
Un escollo a superar serán las reticencias de los países “frugales” del norte de Europa. El jueves, confirmó el Eliseo, Macron se reunirá con el premier italiano, Giuseppe Conte y luego con la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
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