TEHERÁN, 4 de julio (NNN-PRENSA LATINA) — Irán envió a Venezuela otros cuatro buques cargados con 1.1 millones de barriles de gasolina que enfrentan amenaza de decomiso por una demanda de fiscales en Estados Unidos, se supo el viernes.
El cuarteto de tanqueros, Bella y Bering, abanderados por Liberia, y los otros dos, Pandi y Luna, por la república islámica, navegan con rumbo a la nación sudamericana.
Fiscales norteamericanos emitieron una orden para detener la entrega de combustible al país bolivariano, en virtud de medidas punitivas extraterritoriales destinadas a interrumpir lazos comerciales entre Teherán y Caracas.
Se trata de otro intento de ejercer presiones contra armadores, barcos o autoridades marítimas para que cese el cada vez más creciente y estrecho vínculo entre dos naciones que no aceptan la política de Washington.
Con anterioridad, cinco tanqueros iraníes llevaron a puertos venezolanos 1.53 millones de barriles de gasolina y aditivos para procesar combustible.
Ese suministro contribuyó a aliviar la escasez causada por el bloqueo y el castigo con que la Casa Blanca intenta derrocar al gobierno legítimo del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
Los fiscales estadounidenses presentaron una demanda de decomiso civil en el Tribunal del Distrito de Columbia, según consignó The Wall Street Journal.
La querella busca disuadir futuras entregas de combustible iraní a Venezuela y detener los ingresos por ventas de la república islámica.
— NNN-PRENSA LATINA