GINEBRA, 3 de julio (NNN-PRENSA LATINA) — La Organización Mundial de la Salud (OMS) reportó el jueves que la cifra de casos de COVID-19 en el mundo ya superó los 10,5 millones, lo cual ratifica la acelerada velocidad de propagación de la enfermedad.
Con más de 150 mil contagios registrados diariamente en las últimas semanas, el padecimiento causado por el coronavirus SARS-CoV-2 se expande cada vez con mayor rapidez, en tanto los fallecidos por esta causa ascienden a más de 512 mil.
América permanece como el continente más impactado con 5,3 millones de casos y 252 mil decesos, una situación que mantiene en alerta a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), principalmente cuando en algunos países se relajan las medidas de contención de la enfermedad.
La directora de esa entidad de Naciones Unidas, Carissa Etienne, abogó el jueves por un enfoque integral y escalonado para iniciar las distintas fases de la etapa de recuperación post COVID-19, la cual debe ir acompañada de una sólida vigilancia
Las reaperturas deberían darse cuando la transmisión y muertes disminuyan y la ocupación de camas en hospitales sea baja, además de medidas de salud pública para detectar, rastrear, aislar casos y controlar nuevos brotes, recomendó.
Antes de relajar las restricciones hace falta que los gobiernos locales y nacionales apliquen las pruebas oportunas, el aislamiento de casos para reducir la transmisión, el rastreo de contactos, y garanticen el acceso a equipos de protección personal y capacitación para los trabajadores de la salud, precisó la ejecutiva de ese organismo.
Estados Unidos se mantiene como el país más impactado en el continente y en el mundo al acumular 2,6 millones de casos y más de 127 mil muertes, seguido por Brasil, con 1,4 millones de casos y casi 60 mil fallecidos.
Por otro lado, el secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó el jueves que el impacto de la COVID-19 es particularmente severo en países donde existe un conflicto o se está saliendo de él.
En una intervención por medio de video conferencia en el Consejo de Seguridad de la ONU, también señaló que las consecuencias de la pandemia ya pueden verse incluso en varias naciones tradicionalmente consideradas estables.
En las circunstancias actuales, los procesos de paz frágiles podrían verse descarrilados por la crisis, especialmente si la comunidad internacional está distraída, advirtió el titular de Naciones Unidas.
— NNN-PRENSA LATINA
