ROMA, 19 de mayo (NNN-PRENSA LATINA) — El director general de la FAO, QU Dongyu, alertó el lunes sobre la necesidad de prestar atención a la seguridad alimentaria, en medio de la crisis sanitaria por la COVID-19.
‘No podemos esperar a terminar de ocuparnos de las consecuencias sanitarias para pasar a la seguridad alimentaria. Si no empezamos a aplicar ayudas a los medios de subsistencia ahora, nos enfrentaremos a múltiples crisis alimentarias. Y a una factura mucho mayor’, expresó Qu.
El principal directivo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), intervino durante una sesión informativa celebrada hoy para actualizar la respuesta humanitaria ante la pandemia.
De igual modo, Ramesh Rajasingham, secretario general adjunto interino y coordinador adjunto de Ayuda de Emergencia en la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) destacó que ‘cada vez está más claro que las consecuencias de la pandemia van mucho más allá de la salud’.
Rajasingham señaló que actuar temprano además de prevenir mayor vulnerabilidad, puede ser una forma mucho más rentable de abordar la crisis, al tiempo que valoró como esenciales las intervenciones de emergencia sobre los medios de vida para salvar vidas y medios de subsistencia, y alejar a las personas del riesgo.
En igual sentido, Dominique Burgeon, director de Emergencias de la FAO, destacó que ‘cada vez más líderes mundiales subrayan que la pandemia podría costar más vidas a causa del hambre que por las personas realmente infectadas por el virus’ y alertó sobre la necesidad de ‘actuar con rapidez y a gran escala’.
Un comunicado difundido aquí por la FAO indica que ese organismo de la ONU busca 350 millones de dólares para ampliar sus acciones contra el hambre y reforzar los medios de subsistencia en situaciones de crisis alimentaria la cual sería devastadora ante el impacto de la COVID-19.
Según el organismo mundial, aun cuando se ‘desconoce el impacto a gran escala y a largo plazo de la pandemia en la seguridad alimentaria’ existen evidencias cómo diversas naciones están afectadas por el hambre aguda, las personas luchan por acceder a los alimentos, mientras sus ingresos disminuyen y suben los precios.
Valoró que si los agricultores están impedidos de acceder a sus campos, carecen de los medios y de posibilidad de comprar semillas y otros insumos para plantar, y adquirir piensos para sus animales, se perderán las temporadas de siembra, el cultivo se reducirá considerablemente y se perderán también animales.
El documento detalla cómo la FAO presta ayuda a agricultores de naciones como Sudán del Sur, Somalia, Siria, Pakistán y Haití y señala la urgencia de una financiación adicional para hacer frente a las nuevas necesidades que surjan por la incidencia del nuevo coronavirus.
En particular indica el apoyo para salvar los medios de subsistencia que se está prestando actualmente.
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