EL CAIRO, 19 de mayo (NNN-PRENSA LATINA) — Egipto reportó el lunes 535 nuevos casos de COVID-19, la cifra diaria más elevada desde el inicio del brote, y con los que suman 12 mil 764 los contagiados, en tanto los decesos llegaron a 645.
Según autoridades sanitarias, tres mil 440 personas lograron rebasar la letal neumonía desde mediados de febrero a la actualidad, reseñó Ahram on line.
El gobierno egipcio mantiene suspendidos los vuelos internacionales, cerrados colegios, guarderías, universidades, iglesias, mezquitas, museos, sitios arqueológicos, gimnasios y clubes deportivos.
Aunque descartó la instauración de un confinamiento completo sí implantó cuarentenas en las localidades con mayor riesgo y un toque de queda parcial, en tanto sigue vigente el estado de emergencia.
Luego de permitir la apertura de hoteles bajo ciertas normas y la condición de que funcionen al 25 por ciento de su capacidad de alojamiento, el ejecutivo anunció disposiciones más severas para la próxima semana durante Eid al-Fitr, seis días de asueto con los que los musulmanes despiden ramadán y rompen el prolongado ayuno de su mes sagrado.
En la etapa vacacional quedará paralizado el transporte masivo, prohibidos los viajes entre gobernaciones, además no se permitirá el acceso a parques ni playas.
El toque de queda nocturno comenzará cuatro horas antes, en tanto los centros comerciales cerrarán a las 17:00 (Hora Local).
A juicio de especialistas con ese bloqueo casi total el gigante árabe de 100 millones de habitantes podría aplacar la diseminación del contagioso virus.
Egipto logró mantener un ritmo lento de infección hasta comienzos de abril cuando los contaminados no sobrepasaban la cantidad de un millar.
La pandemia golpeó al sector de la salud pues al menos 10 médicos y seis enfermeras han fallecido y unos 90 fueron diagnosticados como portadores del nuevo coronavirus, informaron directivos del gremio.
— NNN-PRENSA LATINA