PARÍS, 17 de mayo (NNN-TELESUR) — Autoridades francesas anunciaron el sábado la captura de Félicien Kabuga, prófugo de la justicia internacional por el genocidio de Ruanda, en el que fueron asesinadas más de 800 mil personas, la mayoría de la etnia Tutsi.
Según la Fiscalía General de París y la Gendarmería, el llamado “financiero del genocidio ruandés” fue detenido cerca de esa capital.
Kabuga, de 84 años, residía en Asnières-sur-Seine, en el departamento Altos del Sena, con una falsa identidad, precisaron.
El Tribunal Penal Internacional para Ruanda acusó al empresario de conspiración para cometer genocidio y de genocidio, y de manera alternativa de complicidad, incitación directa y pública y exterminio como crimen contra la humanidad.
El secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó que la detención de Kabuga envía un poderoso mensaje: a quienes cometan tales crímenes, no podrán evadir la justicia.
Desde 2013, Kabuga era buscado por el Mecanismo Residual Internacional para Tribunales Penales, bajo los cargos de genocidio y crímenes contra la humanidad, presuntamente cometidos en Ruanda en 1994, señaló el titular por medio de un comunicado.
Eventualmente, quienes hayan cometido esos crímenes, serán responsables, incluso más de un cuarto de siglo después, subrayó Guterres.
Además, el secretario general encomió la cooperación entre el Mecanismo Residual Internacional para Tribunales Penales y las autoridades francesas, que condujeron al arresto de Kabuga.
El diplomático portugués recordó que todos los Estados tienen la obligación de cooperar en la ubicación, arresto, detención, entrega y transferencia de los acusados que aún se encuentren en libertad.
“Poner fin a la impunidad es esencial para la paz, la seguridad y la justicia”, destacó el máximo representante de Naciones Unidas y dedicó sus pensamientos a las víctimas de los presuntos delitos de Kabuga, de otros internacionales graves y sus familias.
— NNN-TELESUR