GINEBRA, 26 de abril (NNN-AGENCIAS) — La eficacia de la inmunidad con anticuerpos no está demostrada en este momento y los datos científicos disponibles no justifican la concesión de un pasaporte inmunitario o de un certificado de ausencia de riesgo, advirtió la OMS.
No existen evidencias de que las personas que dan positivo en los test de diagnóstico estén inmunizadas frente al nuevo coronavirus, advirtió el sábado la Organización Mundial de la Salud (OMS), considerando que los llamados “pasaportes de inmunidad” pueden favorecer la propagación de la pandemia.
“No hay ninguna prueba en este momento de que las personas que se curaron de la COVID–19 y que tienen anticuerpos estén inmunizadas frente a una segunda infección”, dijo la organización en un comunicado.
“A la fecha de 24 de abril de 2020, ningún estudio ha evaluado si la presencia de anticuerpos al SARS–Cov–2 confiere inmunidad frente a una futura infección por este virus en los seres humanos”, afirmó.
Algunos gobiernos han propuesto que se entreguen documentos que acrediten la inmunidad de las personas sobre la base de pruebas serológicas que revelen la presencia de anticuerpos en la sangre, con el fin de levantar el confinamiento y permitir poco a poco la vuelta al trabajo y la reanudación de la actividad económica.
Sin embargo, la eficacia de la inmunidad con anticuerpos no está demostrada en este momento y los datos científicos disponibles no justifican la concesión de un “pasaporte inmunitario” o de un “certificado de ausencia de riesgo”, advirtió la OMS.
“Las personas que creen estar inmunizadas contra una segunda infección porque dieron positivo en esas pruebas, podrían ignorar las recomendaciones de salud pública. Recurrir a este tipo de certificados podría, en consecuencia, aumentar los riesgos de que la transmisión continúe”, insistió.
Además, la OMS considera que las pruebas serológicas actualmente utilizadas “necesitan de una validación adicional para determinar su exactitud y fiabilidad”.
En particular, deben permitir distinguir la respuesta inmunitaria al nuevo coronavirus de los anticuerpos producidos por una infección de otro de los seis coronavirus humanos conocidos, cuatro de los cuales provocan resfriados benignos. Los otros dos son los del MERS (Síndrome Respiratorio del Medio Oriente) y el del SRAS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo).
“Las personas infectadas por uno u otro de esos virus son susceptibles de producir anticuerpos que interactúan con anticuerpos producidos en respuesta a la infección provocada por el SARS–CoV–2”, y es entonces imperativo poder identificarlos, señaló la Organización Mundial de la Salud.
Vencer a la actual pandemia, que obliga a la mitad de la población a quedarse encerrada en casa y expone al planeta a una recesión sin precedentes, supondrá el “esfuerzo de salud pública más masivo de la historia”, afirmó el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
Las vacunas deben ser seguras, accesibles y disponibles para todos, subrayó Guterres en una reunión virtual, en la que participaron los líderes de Francia y Alemania, pero no de China, cuna de la pandemia que surgió a fines de 2019, ni de Estados Unidos, que acusa a la OMS de no advertir suficientemente temprano de la crisis.
La OMS lanzó una “colaboración histórica” para acelerar la producción de vacunas y tratamientos contra la COVID–19, explicó su director, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Mientras en Europa la curva de contagios parece entrar en una fase descendente y en América Latina en una ascendente, la carrera por encontrar el producto adecuado ya empezó en los laboratorios, con una media docena de ensayos clínicos en curso.
— NNN-AGENCIAS