EL CAIRO, 24 de abril (NNN-PRENSA LATINA) — Los musulmanes egipcios dan la bienvenida el viernes al ramadán con sus mezquitas cerradas debido a la pandemia de Covid-19, por lo que el mes sagrado para los practicantes del islam tendrá esta vez un carácter distinto.
Esperado durante todo el año, resulta un regocijo, un momento de felicidad espiritual, contrariamente a lo acostumbrado lo festejaremos en la intimidad del hogar pues está en juego la salud, comentó a Prensa Latina un padre de familia de 50 años, devoto de esa religión.
Desde semanas previas -añadió- comienzan los preparativos para decorar o transformar el ambiente de las viviendas con lámparas típicas, imágenes de lunas (astro que marca el inicio del suceso) y otros adornos alusivos, el propósito es ratificar que iniciamos una etapa de especial significación.
Es tradición comprar dátiles y abundantes ingredientes para los platillos preparados a partir del atardecer, se trata de un período de súplicas, de lectura del Corán, de unión familiar, misericordia y también de recuperación corporal cuando intentamos reparar los daños que causamos a nuestro organismo, explicó.
A fin de flexibilizar algunas de las medidas instauradas en ocasión de la mayor celebración dentro del mundo islámico el gobierno egipcio decidió acortar una hora el toque de queda nocturno, permitir el funcionamiento de tiendas los viernes y sábado, no así de restaurantes que sólo podrán elaborar alimentos para satisfacer pedidos a domicilio.
Anticipándose al acontecimiento el Ministerio de Dotaciones además de clausurar temporalmente las casas de culto y llamar a convertir cada vivienda en un templo prohibió los festines culinarios masivos que los fieles suelen organizar en plena calle con el objetivo de romper el prolongado ayuno.
Las autoridades sanitarias de Egipto reportaron un total de tres mil 891 casos de infección por el nuevo coronavirus hasta la fecha, 232 de ellos diagnosticados la víspera, la mayor cifra diaria registrada.
Desde el comienzo del brote a la actualidad fallecieron 287 y mil cuatro lograron recuperarse, precisó la cartera.
La ministra de salud, Hala Zayed, pidió a los ciudadanos acatar las medidas preventivas, particularmente el distanciamiento social durante el mes de ramadán, cuando los egipcios ?en su mayoría musulmanes sunitas- suelen confraternizar entre amigos y familiares.
Asimismo aconsejó tomar cantidades adecuadas de agua y mantener una dieta saludable al terminar el ayuno.
El ejecutivo planea reactivar paulatinamente la vida de la nación una vez concluida esa celebración religiosa, o sea, a finales de mayo, pero de incrementarse el ritmo de contagio por encima de lo esperado deberá entonces adoptar disposiciones más estrictas, advirtió el primer ministro Mostafa Madbouly.
El rango que las autoridades sanitarias consideran aceptable es de hasta 300 casos positivos por día.
Con el objetivo de contener la propagación del SARS-CoV-2 el gigante árabe suspendió también los vuelos internacionales, cerró colegios, universidades, iglesias, museos, sitios arqueológicos e instalaciones turísticas.
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