KUALA LUMPUR, 18 de febrero (NNN-BERNAMA) — El ex presidente cubano Fidel Castro y el primer ministro malasio Tun Dr Mahathir Mohamad fueron los ‘arquitectos’ en la construcción de los fuertes lazos diplomáticos que permitieron a ambos países respetarse y cooperar a pesar de las diferencias en sus sistemas políticos, dijo la embajadora de Cuba en Malasia, Ibete Fernández Hernández.
Hablando en una recepción para conmemorar el 61 aniversario de la Revolución Cubana y los 45 años de relaciones diplomáticas entre La Habana y Kuala Lumpur aquí recientemente, la enviada dijo que los intercambios de delegaciones y acuerdos firmados durante las diversas visitas de ambos líderes llevaron la relación a un nivel superior y “es nuestro deseo que continúe fortaleciéndose en el futuro sobre la base del respeto y la confianza mutua”.
“Con su sabiduría y visión a largo plazo, ellos (Castro y el Dr. Mahathir) hicieron posible que dos países con diferentes sistemas políticos se respeten y cooperen pacíficamente sin que las diferencias sean un obstáculo”, dijo en su discurso en la recepción celebrada en un hotel aquí el jueves pasado.
Hernández dijo que los vínculos en muchas áreas, como comercio, ciencia, biotecnología, deportes, educación, medicina y cultura, se han desarrollado en los 45 años de relaciones bilaterales entre La Habana y Kuala Lumpur.
“Malasia y Cuba han demostrado tener un alto nivel de coordinación y apoyo mutuo en los foros internacionales, no solo para asuntos multilaterales sino también bilaterales y globales que afectan al mundo”, dijo.
El Viceministro de Agua, Tierra y Recursos Naturales de Malasia, Tengku Zulpuri Shah Raja Puji, fue el invitado de honor del evento.
Cuba y Malasia establecieron lazos diplomáticos el 6 de febrero de 1975, en el momento de la división ideológica de la Guerra Fría, y desde entonces han avanzado para disfrutar de relaciones y cooperación significativas en muchas áreas: política, economía, medicina, educación, biotecnología, deportes y relaciones de persona a persona.
La nación isleña del Caribe abrió su embajada en Kuala Lumpur en 1997, y Malasia hizo lo mismo al establecer su embajada en La Habana en febrero de 2001.
Hernández dijo que los cubanos y los malasios han aprendido a verse unos a otros de manera positiva y amigable donde “la relación persona a persona ha creado un gran impacto para crear conciencia sobre sus respectivos países a pesar de la distancia física que separa a ambas naciones”.
“El bloqueo no detuvo a Cuba y no detendrá a Cuba, seguiremos adelante, evitando obstáculos, cambiando lo que se debe cambiar para continuar disfrutando del privilegio de tener la sociedad digna que los cubanos de muchas generaciones ganaron de pie, luchando por sus derechos de emancipación”, dijo.
En otro desarrollo, la embajadora dijo que Cuba ha avanzado en los vínculos con todos los países que estuvieron presentes en la recepción porque “el respeto ha guiado las relaciones sobre las diferencias”.
“Cuba está lista para compartir. No damos lo que nos sobra, sino que compartimos lo que tenemos. Si acatar los principios y expresar solidaridad es un pecado, Cuba y los cubanos continuarán pecando. Su altruismo le ha ganado a Cuba un lugar en la historia que nadie puede negar”, dijo Hernández.
Al comentar sobre el brote de COVID-19, Hernández dijo que uno de los antivirales utilizados para combatir el virus mortal es producido por Cuba y que esperaba que China derrote el desafío impuesto por la enfermedad.
También participaron algunos médicos malasios cuyos estudios médicos fueron totalmente patrocinados por el gobierno cubano.
El Dr. B. Sasitharan, de 29 años, oriundo de Johor y quien obtuvo su título de médico en la Escuela Latinoamericana de Medicina en La Habana, expresó su sincero agradecimiento al gobierno cubano por financiar completamente sus estudios, lo que considera un testimonio del fuerte vínculo de la relación entre Malasia y Cuba.
“Me siento muy agradecido con el gobierno cubano por esto… indica cuán fuerte es la relación”, dijo Sasitharan a Bernama, quien pasó siete años estudiando para obtener un título de médico.
— NNN-BERNAMA
Por V. Sankara