MANILA, 17 de enero (NNN-TELESUR) — Las autoridades en Filipinas alertan que el volcán Taal, ubicado en la provincia de Batangases, todavía representa una amenaza a pesar de la aparente calma tras su erupción el pasado fin de semana.
Según indicaron, los 50.000 habitantes evacuados no pueden retornar a sus hogares pues aún representa un peligro que se produzca otra ación del volcán.
Además, dos personas murieron por ataques al corazón el pasado domingo, durante la erupción del volcán Taal, situado a 65 kilómetros al sur de capital de Filipinas, Manila.
La científica de la agencia de sismología de Filipinas, María Antonia Bornas, expresó a la prensa que la calma puede ser solo una pausa en la actividad volcánica y que “el peligro sigue ahí”.
“Por favor, por ahora déjennos estudiar qué está pasando y qué significa”, añadió la especialista. Sin embargo, los ciudadanos insisten en regresar a sus hogares para comprobar los daños y alimentar a su ganado.
Debido a la evacuación repentina, los habitantes afirman que “no pudieron coger mantas, artículos de higiene, mosquiteras o productos para bebés, como pañales”.
Esta región ubicada en el Cinturón de Fuego del Pacífico es sacudida seguidamente por sismos. Los científicos han señalado que hay fisuras en el suelo y el magma continúa hirviendo bajo el volcán lo que indica la proximidad de una gran erupción.
— NNN-TELESUR