LA PAZ, 1 de enero (NNN-PRENSA LATINA) — La embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado, viajó el martes a la nación azteca tras ser declarada persona non grata por la autoproclamada presidenta del régimen golpista, Jeanine Áñez.
Áñez anunció el pasado lunes en conferencia de prensa esa decisión que también incluyó a la encargada de negocios de la embajada de España, Cristina Borreguero, e informó que tenían 72 horas para abandonar el país tras acusar a los diplomáticos de lesionar, a su juicio, la soberanía boliviana, versión rechazada por autoridades españolas.
El gobierno de facto en la nación andino amazónica responde así a un incidente producido en la sede diplomática mexicana donde se refugian varios exfuncionarios del gobierno de Evo Morales, depuesto mediante un golpe de estado.
Funcionarios españoles fueron detenidos el jueves pasado en las inmediaciones de la residencia de Mercado y, según autoridades locales, entre los arrestados había ‘encapuchados armados’ que intentarían sacar a los refugiados de la sede diplomática custodiada por la policía, declaraciones desmentidas por Madrid.
Por otra parte, la delegación de la Unión Europea (UE) en Bolivia calificó este martes de extrema esa postura y pidió al gobierno de facto enviar a la brevedad una explicación sobre la solicitud de que funcionarios de la nación ibérica abandonen el país.
‘La expulsión de funcionarios diplomáticos es una medida extrema e inamistosa que debe reservarse a situaciones de gravedad, el pleno respeto a la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y el diálogo son fundamentales para reducir la tensión’, afirmó la representación de la UE en un comunicado publicado en su cuenta de Facebook.
El documento expresó además del firme deseo de que esa situación sea superada con celeridad y ‘que las tradicionales y excelentes relaciones de Bolivia con todos los Estados Miembros y la Unión Europea se restablezcan’, concluyó.
— NNN-PRENSA LATINA
