GUATEMALA, 29 de diciembre (NNN-PRENSA LATINA) — La Premio Nobel de la Paz de 1992, Rigoberta Menchú, desde su cuenta en la red social twitter condenó el viernes el asedio en los alrededores de la embajada de México en Bolivia.
La líder indígena guatemalteca llamó a la comunidad internacional a rechazar estas arbitrariedades, cometidas por el Estado de facto boliviano.
Hizo un llamado en especial a la representación la Unión Europea en La Paz, para que insten a detener ‘incondicionalmente estas y otras flagrantes violaciones a las normas, tratados y convenciones del Derecho Internacional’.
‘Este hostigamiento sienta un nefasto precedente en las relaciones internacionales y pone en riesgo la paz, la armonía y el respeto mutuo que ha caracterizado las relaciones entre estas dos grandes naciones’, precisó.
La defensora de los derechos humanos y embajadora de buena voluntad de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco, compartió la preocupación del Gobierno mexicano por el exceso de militares y policías ante la sede diplomática.
Menchú condenó y rechazó ‘enérgicamente el incremento del asedio, hostigamiento e intimidación en los alrededores de la embajada de México en Bolivia, de su excelentísima embajadora María Teresa Mercado y demás personal diplomático’, escribió en el microblog.
La premio nobel guatemalteca suma su voz a otras instituciones y personalidades en denuncia por la vigilancia del personal boliviano de Inteligencia en la sede diplomática mexicana en el país sudamericano.
En el interior de la sede diplomática actualmente se encuentran refugiados nueve exfuncionarios gubernamentales durante la presidencia de Evo Morales.
El ministro de Gobierno de facto, Arturo Murillo, aseguró la víspera que se mantendrán ‘resguardando’ la embajada de México en Bolivia, pese al rechazo internacional a la presencia militar y policial en los alrededores de esa sede diplomática.
Tras el golpe de Estado en Bolivia contra el gobierno de Evo Morales, el 10 de noviembre pasado, comenzó por parte de las autoridades de facto, una persecución política, calificada de cacería por muchos, contra miembros del gabinete ministerial y del Movimiento al Socialismo.
— NNN-PRENSA LATINA