MASCATE, 25 de diciembre (NNN-PRENSA LATINA) — Ante el agravamiento de la salud del sultán Qaboos bin Said, la corte de Omán prepara condiciones para un posible sucesor en un proceso complicado por la falta de descendientes.
Qaboos, quien gobernó este país del Golfo en los últimos 49 años, es divorciado, no tiene hijos y tampoco hay un sustituto oficial.
De ahí que los familiares deberán decidir en un plazo máximo de tres días después de la muerte del sultán, quién será el próximo monarca.
Si no se ponen de acuerdo deberán abrir una carta que el sultán, de 79 años de edad y enfermo de cáncer, debe dejar escrita y sellada y en la que designará a su sucesor.
Omán es un país alejado en las últimas décadas de las tensiones regionales y equidistante del conflicto entre Irán y Arabia Saudita o del bloqueo impuesto a Qatar por el reino saudita y secundado por Bahrein, Emiratos Árabes Unidos y Egipto.
El sultán regresó hace unos días de Bélgica, donde desde hace cuatro años recibe tratamiento contra cáncer de colon que al principio remitió, pero ha vuelto.
Se esperaba que permanecería en la nación europea hasta enero, aunque, al parecer, retornó a casa sin esperanzas.
Qaboos pertenece a la decimocuarta generación de la dinastía Al Bu Saidi que estableció el sultanato tras expulsar a los portugueses en el siglo XVIII.
Se educó en India y la Real Academia militar británica de Sandhurst, y al finalizar estudios lo confinó en palacio hasta que en 1970 asumió el sultanato mediante un golpe de Estado.
— NNN-PRENSA LATINA