NACIONES UNIDAS, 24 de diciembre (NNN-UNIS) — Un brote de un tipo de poliovirus derivado de la vacuna afecta actualmente a una decena de países de la región, pero Kenya, Mozambique y Níger han conseguido frenar la transmisión. El virus es raro y se propaga a través de las heces de los niños recién vacunados que viven en comunidades sin saneamiento básico.
Kenya, Mozambique y Níger frenaron los brotes de poliomielitis que aparecieron en los últimos dos años, lo que les permitió recuperar su estatus de países libres de polio, anunció hoy la Organización Mundial de la Salud.
La transmisión de un poliovirus derivado de la vacuna se detectó en los tres países en 2018 y principios de 2019, y afectó a un total de 14 niños.
“Poner fin a los brotes en los tres países es una prueba de que las actividades de respuesta junto con las campañas de inmunización de alta calidad y la vigilancia cuidadosa de las enfermedades pueden detener los brotes restantes en la región”, dijo el Doctor Modjirom Ndoutabe, coordinador del equipo de respuesta de la OMS para los brotes de poliomielitis en África.
Ndoutabe dijo que se encuentran motivados por el logro y determinados a erradicar todos los tipos de polio del continente.
“Esta es una demostración del compromiso de los gobiernos, la OMS y nuestros socios para garantizar que las generaciones futuras vivan libres de este virus debilitante “, agregó el doctor.
Los poliovirus derivados de las vacunas son raros, pero afectan a las poblaciones no inmunizadas y subinmunizadas que viven en áreas con saneamiento inadecuado.
Cuando los niños son inmunizados con la vacuna oral contra la poliomielitis, el virus de la vacuna atenuada se replica en sus intestinos por un corto tiempo para desarrollar la inmunidad necesaria y luego se excreta en las heces, en el ambiente donde puede mutar. Si la cobertura de inmunización contra la poliomielitis es baja y el saneamiento es inadecuado, los virus mutados se transmiten a las poblaciones susceptibles, lo que da lugar a la aparición de la enfermedad.
La OMS aseguró que, sin embargo, no se ha detectado ningún poliovirus salvaje en África desde 2016. Esto contrasta marcadamente con 1996, un año en el que ese virus paralizó a más de 75.000 niños en todo el continente.
Aún así, algunos países se enfrentan actualmente a brotes derivados de la vacuna: Angola, Benín, Camerún, República Centroafricana, Chad, Costa de Marfil, República Democrática del Congo, Etiopía, Ghana, Nigeria, Togo y Zambia.
Para declarar el fin del brote en un país afectado, los equipos nacionales y regionales de vigilancia de enfermedades y de laboratorio deben confirmar que no se detecta transmisión de polio en muestras recolectadas de niños paralizados, niños en contacto y el medio ambiente durante al menos nueve meses.
La polio es una enfermedad viral, que se transmite de persona a persona, principalmente a través de la ruta fecal-oral o, con menos frecuencia, a través de agua o alimentos contaminados, y se multiplica dentro de los intestinos.
Si bien no existe cura para la poliomielitis, la enfermedad se puede prevenir mediante la administración de una vacuna simple y efectiva.
— NNN-UNIS