BAGDAD, 1 de diciembre (NNN-TELESUR) — Cientos de manifestantes protestaron el sábado frente a la comandancia de la Policía de Di Qar, en la ciudad de Nasiriya, al sur de Irak, en otra jornada para exigir la renuncia del gobierno, así como el fin de la corrupción y el desempleo en el país.
Según una fuente anónima del Ministerio del Interior de Irak, no se registran heridos en estos enfrentamientos, mientras las fuerzas del orden dispararon al aire para dispersar la manifestación que ha tenido como epicentro la sede policial.
Si bien las autoridades de la provincia decretaron tres días de duelo en esa zona por las víctimas en las últimas dos jornadas (al menos 46 muertos), los protestantes tomaron varios puentes que unen a la ciudad mediante el río Éufrates.
Por otra parte, en Bagdad (capital) se registraron 11 personas heridas cuando la policía disparó y lanzó gases lacrimógenos para dispersar una manifestación, mientras que en la ciudad sureña de Najaf, dos personas murieron y otras 15 resultaron heridas en esta jornada de fin de semana.
En medio de las crecientes protestas que afectan el país hace dos meses, el primer ministro iraquí, Adel Abdul Mahdi, renunció a su cargo de manera oficial ante el Parlamento, como también lo hizo el director de su oficina y el secretario general del Consejo de Ministros.
Irak ha registrado desde el inicio de las manifestaciones más de 420 muertos y alrededor de 15.000 heridos en medio de la inestabilidad política que vive la nación árabe.
El Gobierno de Irak estableció un Tribunal central para juzgar los delitos de corrupción, declaró Saad Hadithi, portavoz del primer ministro que presentó su renuncia.
“Ha sido creado un tribunal central que se especializará en delitos relacionados con la corrupción. El tribunal adoptará decisiones sobre funcionarios iraquíes acusados de estar involucrados en casos de corrupción”, dijo Hadithi, citado por la cadena Al Arabiya.
— NNN-TELESUR
