LONDRES, 6 de octubre (NNN-PRENSA LATINA) — El primer ministro británico, Boris Johnson, instó el sábado a la Unión Europea (UE) a aprobar su oferta final para un Brexit amigable, y evitar un divorcio en malos términos dentro de 25 días.
Estamos haciendo las maletas para irnos el 31 de octubre. La única pregunta es si Bruselas (la UE) nos despedirá alegremente con un acuerdo mutuo, o nos obligará a salir por nuestra cuenta y riesgos, aseguró el gobernante conservador en sendos artículos públicos en dos diarios dominicales.
En opinión de Johnson, la alianza europea debe aprovechar la oportunidad que le ofrece la nueva propuesta presentada por Londres, y sentarse a la mesa de negociaciones con un espíritu de compromiso y cooperación.
Recalcó que su oferta permitiría eliminar la salvaguarda introducida por la UE para evitar una frontera física entre ambas Irlandas, pero que es rechazada por los euroescépticos británicos, sin tener que implementar chequeos aduanales, además de que respeta el acuerdo de paz irlandés y da garantías a los agricultores y empresarios.
En esencia, Johnson propone que la provincia británica de Irlanda del Norte abandone la unión aduanera europea junto con el resto del Reino Unido una vez consumado el Brexit, pero continúe dentro del mercado único hasta 2025, cuando tocaría a la Asamblea norirlandesa decidir si desea seguir bajo ese régimen, o acogerse a las reglas británicas.
Tras apuntar este domingo que su propuesta representa un paso decisivo por parte de Londres, el Premier señaló que toca ahora el turno a la UE de actuar, y demostrar que está interesado en alcanzar un acuerdo que logre el apoyo del Parlamento británico.
El Reino Unido debió salir de la alianza europea el 31 de marzo pasado, después que el 52 por ciento de los británicos votó a favor del Brexit en el referendo de 2016, pero la negativa de la Cámara de los Comunes a respaldar el tratado de retirada firmado por la entonces primera ministra Theresa May obligó a posponer la salida, primero para abril pasado, y luego para el último día de octubre.
Según Johnson, no solo los legisladores conservadores y unionistas británicos, sino también muchos laboristas, estarían dispuestos a apoyar su oferta, aunque a juzgar por la reacción de los líderes opositores y algunos altos funcionarios de la UE, el nuevo plan parece estar condenado al fracaso.
Para el jefe del laborismo británico, Jeremy Corbyn, se trata de un ‘refrito’ del fracasado pacto firmado por May, mientras que el vocero de los nacionalistas escoceses en el Parlamento, Ian Blackford, lo consideró inaceptable e inviable.
Del otro lado del canal de la Mancha también se alzaron voces como la del jefe negociador del Brexit, Michel Barnier, quien dijo que todavía habría que trabajar mucho para alcanzar un acuerdo.
Aunque Johnson repite hasta la saciedad que el Reino Unido abandonará la UE el 31 de octubre, con o sin acuerdo, el Parlamento británico aprobó una ley a principios de septiembre para obligarlo a solicitar un aplazamiento de la salida, en caso de no firmarse un nuevo pacto antes del 19 de octubre.
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