PARÍS, 28 de septiembre (NNN-PRENSA LATINA) — El movimiento de los Chalecos Amarillos acusó el sábado aquí al Gobierno de Francia de reprimirlo con violencia, durante su cuadragésimo sexto fin de semana consecutivo de protestas desde el 17 de noviembre.
En una de las manifestaciones convocadas en esta capital, los activistas corearon en las inmediaciones de la Plaza de la Bolsa ‘(Emmanuel) Macron nos hace la guerra y la Policía también’ y demandaron la renuncia del presidente y del ministro del Interior, Christophe Castaner, en medio de un fuerte despliegue de uniformados.
Las autoridades impidieron a los manifestantes desplazarse por una de las avenidas colindantes, lo cual generó tensiones, hasta que estos emprendieron el trayecto autorizado por la Prefectura, acompañados por pancartas, banderas, consignas y cantos.
Vestidos en su mayoría con el tradicional atuendo que los identifica, defendieron su derecho a protestar contra el capitalismo y los males de la sociedad que rechazan, como la pérdida del poder de compra de los ciudadanos comunes.
Cientos de personas han resultado heridas en 10 meses de movilizaciones, tanto protestantes como policías, con acusaciones mutuas de violencia.
Los chalecos amarillos condenan el uso de gases lacrimógenos, granadas aturdidoras y balas de goma, que dejaron varios mutilados, mientras el Gobierno señala que en ocasiones las marchas causaron destrozos y lesiones a agentes del orden.
En la jornada de hoy, manifestantes también rechazaron la reforma a la jubilación promovida por el Ejecutivo.
Otras partes de la ciudad y del país fueron escenario de protestas del movimiento, el cual ha perdido en los últimos meses considerable fuerza, al pasar de decenas y hasta cientos de miles de personas en las calles a finales de 2018 y principios de este año a unas pocas miles sábado tras sábado.
Las figuras públicas de los chalecos amarillos llamaron a revitalizar las manifestaciones tras las vacaciones veraniegas, pero muchos dudan de que puedan lograr el poder de convocatoria que tuvieron en los inicios.
— NNN-PRENSA LATINA