NACIONES UNIDAS, 23 de julio (NNN-UNIS) — El 25% de la población de animales en peligro de extinción se ha reducido gracias al trabajo de conservación de zoológicos en todo el mundo. Algunas de las crías pueden ser liberadas en áreas protegidas, que cuentan con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
El pasado 11 de mayo nacieron en el zoológico de Chapultepec, el más importante de México, seis crías de lobo mexicano. Cinco hembras y un macho forman parte ya de la población de esta especie considerada en peligro de extinción por la Convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestres y que ahora se encuentra en etapa de recuperación.
Este trabajo de conservación es un esfuerzo binacional realizado por los gobiernos de México y Estados Unidos.
En los últimos años, en tres zoológicos de la Ciudad de México, han nacido más de 20 camadas de esta especie, específicamente de la familia “San Juan de Aragón”. Existen en total tres familias de lobo mexicano, las otras dos se encuentran principalmente en Estados Unidos: la McBride y la Ghost Ranch.
Fernando Gual Sill, director general de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre de la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México explica que hoy en día los zoológicos constituyen una herramienta de conservación sumamente importante.
“Sin los zoológicos ya hubiéramos perdido muchas especies, varias de ellas mexicanas. El 25% de las especies que se ha alejado de la extinción en el mundo ha sido gracias al cautiverio”.
Este año, durante el mes de julio, el zoológico de Chapultepec en la Ciudad de México cumple 96 años y desde entonces ha realizado una importante labor de conservación de especies.
Fue fundado por Alfonso Luis Herrera, considerado el “Padre de la Biología en México” y ha tenido importante vocación para mantener especies a salvo de riesgos de su hábitat natural como cazadores furtivos, depredadores o enfermedades.
En la actualidad este trabajo sigue. Se ha dado seguimiento a la conservación de especies como el hurón de patas negras o el cóndor de california del que hay dos crías nacidas recientemente.
En el zoológico de Chapultepec actualmente hay 985 animales de 195 especies diferentes y todos los días se preparan 195 dietas diferentes de acuerdo a las necesidades de cada animal.
“Promovemos la conservación integrada, hacemos investigación, trabajo de población y sobre todo de difusión. Esto último es muy importante para que sobre todo niños y niñas puedan ver a todos los animales, conocerlos y que entiendan la importancia de las acciones de conservación de especies y su impacto en nuestro mundo” señala Gual Sill.
En 1975 el Gobierno de la República Popular China regaló a México una pareja de pandas gigantes y se logró su reproducción y su supervivencia fuera de China. Se escribió desde entonces una historia de éxito en el zoológico de Chapultepec.
Hoy personas de toda la región acuden a esta ciudad a conocer a los únicos pandas que habitan en el América Latina: Xuang Xuang de 32 años y a Xing Xing, de 29 años, que son los pandas gigantes más longevos, los únicos que no son propiedad de China y que gracias al esfuerzo de quienes laboran el zoológico, han logrado duplicar la edad de sus padres.
De acuerdo con el Programa de las Naciones Unidas apra el Desarrollo en México, este es un país “mega-biodiverso” al ser hogar de aproximadamente el 12% de las especies del planeta.
Por ello, este Programa puso en marcha el proyecto “especies en riesgo”, que busca salvaguardar la biodiversidad de México y su importancia mundial mediante el establecimiento de instrumentos que garanticen el funcionamiento eficaz y sostenible de las áreas protegidas para la conservación de especies en riesgo que sean prioritarias.
El lobo mexicano se encuentra entre las siete especies terrestres (el águila real, el berrendo de Baja California, el venado bura de Cedros, el jaguar, el tapir y el cóndor de Baja California) que se buscan conservar mediante este proyecto.
De acuerdo con Fernando Gual Sill, es posible que algunos de estos lobos puedan ser liberados en las áreas protegidas para aumentar la presencia de esa especie en su hábitat natural.
— NNN-UNIS
