PANAMÁ, 13 de julio (NNN-PRENSA LATINA) — El Gobierno del presidente Laurentino Cortizo anunció que enfrentará la pobreza extrema en los 150 corregimientos de Panamá donde se concentran los más altos índices, ubicados principalmente en áreas campesinas y rurales-indígenas.
Así lo informó el viernes la ministra de Desarrollo Social Markova Concepción, en conferencia de prensa, después de concluir la primera reunión del Gabinete Social, grupo multidisciplinario constituido para enfrentar los graves problemas de la sociedad mediante la articulación de entidades públicas.
Concepción adelantó que Cortizo, quien asistió a la reunión, propuso el Proyecto Colmena, que será la intervención progresiva de acciones del Gabinete en las áreas críticas marcadas por desigualdad y pobreza extrema, según el mapa elaborado por el Ministerio de Economía y Finanzas.
El plan consistirá en una intervención social para identificar en cada comunidad un proyecto de organización, producción de alimentos, salud, agua limpia, saneamiento, educación, actividades generadoras de ingresos, solución de vivienda, cultura, seguridad e infraestructura vial, explicó la fuente.
Anunció que el 27 de julio próximo, a menos de un mes de la toma de posesión, Cortizo encabezará el inicio de este trabajo social en la comunidad de Tambo, ubicada en una empobrecida zona rural de la central provincia de Coclé, cuya actividad económica principal son los cultivos y ganadería de subsistencia, mientras solo comercializan naranjas y café.
Las últimas estadísticas oficiales publicadas señalaron que la pobreza general del país era de 22,1 por ciento en 2016, mientras la extrema alcanzó a 9,9 por ciento en ese propio año.
La carrera por las exitosas cifras macroeconómicas de Panamá, uno de los líderes regionales del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), enmascaró los altos niveles de pobreza y desigualdad, señalaron analistas.
El Istmo prácticamente alcanzó al puntero Chile en el ingreso per cápita, con 25 mil 676 dólares, solo 304 dólares por debajo, pero paradójicamente la pobreza casi triplicó a la nación sureña, a la vez que es el sexto país del mundo con peor distribución de la riqueza, según el coeficiente Gini de Naciones Unidas.
La economía más dinámica de América Latina en las tres últimas décadas, como la calificó el Fondo Monetario Internacional, con una tasa de crecimiento que duplicó el de América Latina, está a punto de alcanzar indicadores de países desarrollados si lograra en el presente año 5,5 por ciento del PIB, y el per cápita de 35 mil 400 dólares.
El organismo internacional otorgó al Istmo el vigésimo tercer lugar entre las economías de más rápido crecimiento en el mundo en el último cuarto de siglo y el décimo entre los de vigoroso avance económico en la arena internacional, algo reservado a naciones petroleras.
— NNN-PRENSA LATINA
