KUALA LUMPUR, 19 de junio (NNN-BERNAMA) — El miércoles, más de 40 refugiados yemeníes se reunieron pacíficamente frente al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en esta capital para presentar un memorando en el que se exigen sus derechos.
El memorando fue presentado al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, por la activista yemení Leena Al-Mujahed a través del Representante Adjunto del ACNUR, Maja Lazic.
Al-Mujahed, quien también es un refugiado, dijo que el grupo representa a unos 7,000 refugiados yemeníes en Malasia para obtener sus derechos, incluida la ayuda financiera, el seguro de salud y las oportunidades laborales.
Según Al-Mujahed, la situación de los refugiados yemeníes en este momento no es satisfactoria porque se descuidan sus derechos básicos como refugiados y el ACNUR no ha desempeñado su papel.
“A lo largo de la reunión de hoy, el ACNUR de Malasia nos ha informado que se realizará una reunión para discutir los problemas planteados por nuestra comunidad”.
“Esperaremos una respuesta positiva de ellos tan pronto como sea posible”, dijo a Bernama después de la reunión de una hora y la presentación del memorando.
Al-Mujahed dijo que la esencia del memorándum incluye el derecho de colocación en un tercer país, los derechos educativos y vocacionales básicos, los derechos de seguro de salud y los programas de empleo para refugiados.
Según el sitio web de ACNUR, un refugiado tiene derecho a un asilo seguro.
“Los refugiados deben recibir al menos los mismos derechos y ayuda básica que cualquier otro extranjero que sea residente legal, incluida la libertad de pensamiento, de circulación y la protección contra torturas y tratos degradantes.
“Los derechos económicos y sociales son igualmente aplicables. Los refugiados deben tener acceso a la atención médica, la educación y el derecho al trabajo”, agregó la declaración en el sitio web.
Mientras tanto, el líder de la comunidad de los refugiados yemeníes, Waleed Al-Fakih, dijo que el mitin de hoy se llevó a cabo para instar al ACNUR a tomar una posición y esforzarse por resolver los problemas de los refugiados yemeníes en el país.
“Hemos estado viviendo en Malasia durante los últimos ocho años y solo tenemos tarjetas de ACNUR sin que se nos concedan los derechos de refugiado. Nuestra solicitud de reubicación en terceros países también está congelada”.
“Estamos enfrentando una vida difícil sin un hogar permanente y sin trabajo para mantener a nuestra familia”, dijo.
A fines de mayo de este año, hay cerca de 173,700 refugiados y solicitantes de asilo registrados en el ACNUR en Malasia.
De estos, aproximadamente 93,000 son rohinyás, 24,000 (China), 9,700 (musulmanes de Myanmar), 4,000 (Rakhine) y 23,300 de países como Pakistán, Yemen, Somalia, Afganistán, Sri Lanka, Irak, Palestina y Siria.
— NNN-BERNAMA