YAKARTA, 17 de junio (NNN-VNA) — El gobierno indonesio informó que se devolvieron cinco contenedores de residuos a Estados Unidos, y declaró que no deja que su país se convierta en un “basurero”.
Así lo afirmó Sayid Muhadhar, alto funcionario del Ministerio Nacional de Medio Ambiente, ante los medios de prensa el sábado en esta capital.
Según la misma fuente, los mencionados depósitos contenían botellas, desechos plásticos, y pañales, en lugar de papeles como lo establecido en las regulaciones de su país.
Los desechos, que aún no se saben su origen, pertenecen a una empresa canadiense, y fueron transportados a fines de marzo último desde la ciudad de Seattle, de Estados Unidos, a Surabaya, la segunda mayor metrópoli del país sudesteasiático, precisó.
Mientras tanto, las autoridades indonesias siguen investigando otros contenedores de basuras en los puertos de Yakarta, y de la ciudad de Batam, ubicada en la isla de Sumatra.
Anteriormente, Malasia y Filipinas también enviaron, el mes pasado, cientos de toneladas de residuos plásticos a sus países de origen.
El problema se debe a la decisión de China de no importar más residuos de otros países del mundo el año pasado, por lo que la mayoría de los materiales residuales fueron enviados a las naciones del Sudeste Asiático, incluidas Malasia, Indonesia y Filipinas.
Según el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), se producen alrededor de 300 millones de toneladas de plásticos cada año, lo que constituye un gran peligro para el medio ambiente.
— NNN-VNA