BEIRUT, 28 de mayo (NNN-HISPANTV) — El Líbano sigue nadando a contracorriente para salvar la economía del país y se comprometió en la Conferencia de París a realizar una serie de reformas fiscales.
El Líbano se encuentra en anestesia económica. Desde finales de abril, el Gobierno debate la cura que despierte la economía. Por fin, los presupuestos de Estado llegan acordados este viernes tras una última sesión mantenida en el palacio presidencial libanés donde el presidente de la nación, Michel Aoun, dio su beneplácito para seguir adelante.
El nuevo déficit significa una disminución de 4 puntos con respecto al año 2018. El presupuesto basa, en parte, sus cuentas en reducir las importaciones y potenciar la producción nacional aumentando las exportaciones.
Para cumplir con las condiciones de la Conferencia de donantes de París que le entregará 11 000 millones de dólares, el criterio adoptado es la austeridad. Reducir o congelar los salarios y ayudas a funcionarios, militares o familias de mártires ha traído a las calles libanesas una oleada de protestas.
Con el presupuesto general del Estado por fin aprobado, deberá pasar por el beneplácito del Parlamento libanés. Están en juego 11 000 millones de dólares de préstamo de la Conferencia de París. Comenzará así una ardua tarea para levantar la economía del país del abismo en el que se encuentra.
— NNN-HISPANTV
Por Isabel Pérez