NACIONES UNIDAS, 18 abr (NNN-UNIS) — Las agencias humanitarias que operan en la Franja de Gaza estiman que medio millón de personas han sido desplazadas desde que se reiniciaron los bombardeos israelíes el 18 de marzo, según informó este miércoles el portavoz de la ONU, Stephan Dujarric.
Este nuevo éxodo se suma a los cientos de miles de personas que ya habían sido desplazadas repetidamente antes del alto el fuego anterior. Sin embargo, las condiciones para estas personas son cada vez más precarias: no quedan tiendas de campaña disponibles en Gaza, y en áreas como Bani Suhaila, en Khan Younis, las familias reciben solo mantas y lonas impermeables como ayuda.
El personal de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) documentó durante visitas recientes que los refugios en Khan Younis están abarrotados, sin alimentos, agua ni medicamentos disponibles. La desnutrición aguda está aumentando, y la falta de recursos obligó a reducir en dos tercios la cantidad de niños que recibieron alimentación suplementaria en marzo.
Las restricciones al acceso humanitario siguen siendo un obstáculo crítico. Solo dos de seis traslados planificados fueron autorizados por las autoridades israelíes, incluyendo una misión urgente para recuperar combustible en Rafah, esencial para mantener operaciones básicas en la Franja.
A pesar de los desafíos, los comedores comunitarios preparan diariamente más de un millón de comidas, aunque esta cifra sigue siendo insuficiente para cubrir las necesidades de los 2,1 millones de habitantes de Gaza, quienes dependen casi exclusivamente de la ayuda alimentaria.
Dujarric recordó que el derecho internacional exige la protección de civiles, trabajadores humanitarios y personal médico, así como el acceso a sus necesidades esenciales.
— NNN-UNIS
