GINEBRA, 15 de mayo (NNN-PRENSA LATINA) — La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) reiteró el martes preocupación por el deterioro de la situación humanitaria en Trípoli, como consecuencia del conflicto armado, con saldo de más de 250 muertos y 66 mil personas desplazadas.
En la capital libia y zonas vecinas 13 mil 310 familias huyeron de sus hogares desde el inicio de las agresiones el 4 de abril, cifra que podría aumentar a medida que se intensifican los enfrentamientos entre el autodenominado Ejército Nacional, liderado por el mariscal Khalifa Haftar, y el Consejo Presidencial, Gobierno reconocido por la ONU.
La situación es especialmente alarmante para más de tres mil 300 migrantes, entre ellos, niños y mujeres embarazadas, advirtió la OIM.
‘Si bien nuestros equipos en el terreno continúan brindando asistencia humanitaria de emergencia a las poblaciones afectadas por el conflicto, reconocemos que se debe hacer más por todos lados para garantizar la seguridad de los civiles’, dijo Othman Belbeisi, jefe de misión del organismo en ese país norafricano.
El 23 de abril el organismo hizo hoy un llamamiento para recaudar 4,3 millones de dólares en los próximos tres meses, con el fin de asistir a las víctimas.
La OIM informó que proporciona alimentos, atención primaria de salud, apoyo para el retorno humanitario voluntario y mejores condiciones de vida de los migrantes en centros de detención.
La ONU pidió a las partes en conflicto una tregua humanitaria para realizar la evacuación de los civiles atrapados en el fuego cruzado y permitir la prestación de servicios de emergencia.
Dividida de facto en tres administraciones y con presencia de varias milicias armadas, Libia se encuentra inmersa en el caos y la guerra civil desde el derrocamiento del Gobierno de Muamar Gadafi y su asesinato en 2011, en los que participaron Estados Unidos y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
Además del Consejo Presidencial, el país cuenta con otro poder desde el Parlamento en Tobruk, dominado por Haftar, y un tercero a raíz de la alianza que suponen las ciudades-estado de Misrata y Zintan, en el noroeste.
— NNN-PRENSA LATINA